Violento enfrentamiento en General Terán deja tres muertos y heridos, incluidos civiles inocentes
La madrugada de este domingo, el municipio de General Terán, en la zona citrícola de Nuevo León, fue escenario de un violento enfrentamiento armado entre policías municipales y un grupo criminal, dejando un saldo de tres presuntos delincuentes abatidos, tres mujeres civiles heridas y dos policías lesionados. El trágico incidente ocurrió en el poblado de Santa Ana Nuevo, alrededor de las 2:30 de la madrugada, cuando los habitantes de la comunidad se despertaron alarmados por el intenso tiroteo.
Los hechos se desarrollaron cerca del cruce de Camino a Hacienda Santa Ana y Camino a San Pedro, donde el grupo armado se enfrentó con la policía en un choque que se extendió durante media hora en dos intervalos. El saldo final incluyó daños a tres patrullas municipales, cuatro vehículos asegurados junto con cuatro armas largas, así como equipo táctico. Entre los heridos se encuentran dos oficiales, uno de ellos en estado crítico tras recibir un disparo en la cabeza.
Las víctimas colaterales de este enfrentamiento fueron tres mujeres que dormían en sus hogares, los cuales quedaron en medio del fuego cruzado. María Teresa, de 21 años, fue herida en la cabeza y en una pierna; María Isabel, de 36, recibió un balazo en una pierna; y Rosa Amelia, de 39, fue impactada en un hombro. A dos de las lesionadas se les trasladó de urgencia al Hospital La Carlota en Montemorelos, donde, según los informes, les fue negada la atención, por lo que fueron llevadas a otro centro de salud.
El enfrentamiento forma parte de una preocupante escalada de violencia en la región citrícola de Nuevo León, que en semanas recientes ha experimentado un aumento de incidentes de seguridad. El municipio de General Terán es gobernado por David Sánchez Quintanilla, cuñado del actual Gobernador del estado, Samuel García Sepúlveda, ambos pertenecientes al partido Movimiento Ciudadano.
Las primeras investigaciones indican que los atacantes lograron escapar en su mayoría entre el monte después del prolongado intercambio de disparos. Uno de los agentes heridos, identificado como Francisco, permanece en estado grave tras recibir un disparo en la cabeza, mientras que su compañero, Javier, sufrió una herida en la pierna.
Al lugar llegaron las fuerzas de seguridad para asegurar la zona y levantar los primeros informes. En la escena, junto a los tres presuntos delincuentes abatidos, fueron asegurados cuatro vehículos y varias armas de alto calibre, además de equipo táctico. Dos de los abatidos vestían ropa camuflada verde y fueron encontrados dentro de una camioneta Ford Expedition color arena, mientras que el tercero, vestido con bermuda beige, quedó tendido en la banqueta.
Cabe señalar que, apenas el miércoles pasado, el alcalde Sánchez Quintanilla había entregado nuevas patrullas Dodge Ram a la policía municipal; dos de estas unidades resultaron dañadas durante el enfrentamiento. La Fiscalía General de Justicia del Estado ha comenzado las investigaciones para confirmar si los abatidos pertenecían a un grupo delictivo organizado.
Este incidente vuelve a poner en el centro de atención la situación de inseguridad en Nuevo León y el desafío que enfrentan las autoridades locales para restaurar la paz en las comunidades rurales. La violencia en la región citrícola continúa en ascenso, afectando cada vez más a la población civil, que sufre las consecuencias de los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y grupos armados.