Transportistas Unidos por la Justicia: Bloqueos Masivos en Reacción a la Violencia
En una demostración contundente de unidad y demanda de justicia, transportistas de varias rutas en el área de Nezahualcóyotl y Iztapalapa, han llevado a cabo cinco bloqueos masivos, cuatro de ellos en vialidades clave de Nezahualcóyotl y uno en la importante calzada Zaragoza, en la alcaldía de Iztapalapa. Esta acción colectiva surge como respuesta al trágico asesinato de uno de sus líderes, un hecho que ha conmocionado a la comunidad y despertado un clamor por mayor seguridad y justicia.
El lamentable incidente ocurrió ayer domingo, cuando el operador de una unidad urbana, perteneciente a la Corporación Troncal de Autotransportes de Oriente, fue brutalmente atacado en la intersección de la avenida Escondida y calle Ciclomores, en la colonia La Perla. Según los informes, dos individuos en una motocicleta abrieron fuego contra el conductor, cuya ruta conecta el Metro Pantitlán con el Panteón municipal de Nezahualcóyotl. Tras el ataque, los agresores huyeron por la avenida Escondida hacia Carmelo Pérez, eludiendo a las autoridades.
En un intento desesperado por salvar su vida, el chofer fue llevado a las instalaciones de la Cruz Roja en La Perla, donde, desafortunadamente, no pudo recibir atención médica debido al cierre temporal de la delegación. Paramédicos de Rescate Municipal confirmaron el fallecimiento del líder de transportistas en el lugar.
Como reacción a este acto de violencia y la falta de respuestas efectivas, operadores de las rutas 42, 86 y otras rutas troncales, han iniciado bloqueos en puntos estratégicos: Periférico Oriente y sus entronques con Bordo de Xochiaca y Pantitlán; Bordo de Xochiaca y Adolfo López Mateos; así como en Cuarta Avenida y Carmelo Pérez. Paralelamente, otro grupo de transportistas se ha posicionado en la calzada Ignacio Zaragoza, cerca de la estación Peñón Viejo de la Línea A del metro.
Estos bloqueos no solo reflejan el dolor y la indignación de los transportistas, sino también una crítica directa a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, a la que acusan de inacción frente a las repetidas denuncias presentadas contra bandas de extorsionadores. La comunidad de transportistas, históricamente resiliente, exige ahora una respuesta contundente de las autoridades para garantizar la seguridad y la paz en sus rutas de trabajo.
Este acto de protesta masiva subraya la urgente necesidad de abordar la violencia y la extorsión que afectan a los trabajadores del transporte. Es un llamado a la acción para las autoridades, un recordatorio de que la seguridad y la justicia no pueden esperar. La solidaridad y la determinación de los transportistas en estos momentos difíciles son un ejemplo de su compromiso no solo con sus colegas, sino con la comunidad en su conjunto.