Sheinbaum rinde informe con unidad institucional y rostro republicano: “Vamos bien y vamos a ir mejor”

Ciudad de México. — En un acto cargado de simbolismo y dignidad institucional, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo rindió su Primer Informe de Gobierno desde el Patio de Honor de Palacio Nacional, en un evento que marcó el regreso de las formas republicanas al reunir, de manera solemne, a los representantes de los tres poderes de la Unión. Fue una ceremonia que reivindicó el respeto entre instituciones y refrendó el rumbo transformador de la nación.

Entre ovaciones y vítores, la mandataria compareció ante 300 invitados especiales —empresarios, gobernadores, ministros, funcionarios y representantes de pueblos originarios— para presentar los logros del primer año de su administración, en un tono que combinó firmeza, sensibilidad histórica y visión de futuro. “Vamos bien y vamos a ir mejor”, dijo con claridad, ratificando que su gobierno da continuidad al proyecto iniciado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, pero con sello propio y renovado ímpetu.

Uno de los momentos más significativos fue la presencia del nuevo ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Hugo Aguilar Ortiz, quien arribó a Palacio Nacional a pie, vestido con una guayabera blanca que evocó sencillez y cercanía con el pueblo. Su presencia no solo testificó el inicio de una nueva etapa en el Poder Judicial, sino también el restablecimiento del diálogo y la armonía entre los poderes del Estado.

“Se termina la era del nepotismo, la corrupción y los privilegios en la Corte. Comienza una nueva etapa de legalidad y justicia”, subrayó Sheinbaum al destacar la profunda reforma al Poder Judicial que ya ha sido consumada con el respaldo del pueblo. Este mensaje, a diferencia de los desplantes del pasado, selló una nueva relación entre la Presidencia y la Suprema Corte, ahora marcada por el respeto mutuo y el compromiso con el pueblo.

Durante el evento, las pantallas proyectaron imágenes de los momentos más significativos del presidente López Obrador, desde sus giras por todo el país hasta su liderazgo en la reducción de la pobreza, logros que Sheinbaum reivindicó sin mezquindades: “Damos continuidad y avanzamos sustentados en la gran hazaña del presidente… sacó de la pobreza a más de 13.5 millones de personas”.

También hizo énfasis en su llegada a la Presidencia como un símbolo de la creciente participación de las mujeres en la vida pública: “Rompimos barreras que por siglos parecían imposibles de derribar”, afirmó.

En el acto estuvieron presentes los principales líderes empresariales del país, como Carlos Slim, Germán Larrea y Daniel Chávez, junto con Altagracia Gómez, presidenta del Consejo Asesor Empresarial. Su presencia ratificó el respaldo del sector productivo al nuevo proyecto de nación, definido por la mandataria como “el plan social más ambicioso en la historia de México”.

Así, con solemnidad republicana y firmeza transformadora, Claudia Sheinbaum no solo rindió cuentas a la nación, sino que trazó el camino hacia un país más justo, soberano y democrático. La Cuarta Transformación no solo continúa, sino que se profundiza con rostro femenino, legitimidad popular y un firme compromiso con la justicia social.