Sheinbaum honra el legado humanista y progresista del papa Francisco

Ciudad de México.— La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo expresó su respeto y reconocimiento al legado del papa Francisco, quien falleció ayer a los 88 años de edad, destacando su pensamiento humanista, su crítica al modelo neoliberal y su permanente compromiso con los más humildes. En su conferencia matutina, la mandataria señaló que el pontífice fue una figura clave para el pensamiento contemporáneo, no solo dentro de la Iglesia católica, sino en el mundo entero.

Sheinbaum calificó el pensamiento del sumo pontífice como “muy progresista”, subrayando su cercanía con los sectores más vulnerables de la sociedad y su llamado constante a la paz. Aunque evitó calificarlo como “el Papa más revolucionario”, reconoció la profunda influencia que tuvo en los valores y la orientación de la Iglesia católica. “Fue un hombre que siempre hizo un llamado al mundo entero a la construcción de la paz”, apuntó.

La mandataria también destacó que Francisco fue un férreo crítico del neoliberalismo y del consumismo, posturas que compartía con los principios del movimiento de transformación que encabeza. “La recuperación de valores de austeridad en su propia persona y en general en la Iglesia católica, valores que nos parecen muy importantes, quedan como una parte esencial de su legado”, añadió.

En señal del respeto institucional del Gobierno de México, Sheinbaum informó que no acudirá personalmente a los funerales del pontífice, programados para el sábado 26 de abril, pero confirmó que la titular de la Secretaría de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, acudirá en su representación. “Vamos a enviar a Rosa Icela como representante del gobierno de México. Sí va a ir la secretaria de Gobernación en nuestra representación”, puntualizó.

Durante la conferencia de prensa, se anunció además que se preparará una semblanza del pensamiento del papa Francisco para rendir homenaje a su vida y obra, destacando su compromiso con los valores humanistas y su lucha constante por una sociedad más justa y solidaria.

El papa Francisco, primer pontífice latinoamericano, dejó una huella imborrable por su defensa del medio ambiente, su apertura al diálogo interreligioso, y por su llamado constante a construir puentes entre los pueblos y no muros. Su cercanía con las causas sociales y su voz crítica frente a las desigualdades lo convirtieron en un referente moral global.

Con estas declaraciones, la presidenta Claudia Sheinbaum reafirma el compromiso de su gobierno con los valores de justicia social, austeridad, y paz, compartidos por el pontífice argentino. En tiempos de grandes desafíos globales, el legado del papa Francisco resuena como un faro de esperanza, dignidad y fraternidad para los pueblos del mundo.