Sheinbaum cuestiona incoherencia de EE.UU. en acuerdos con narcotraficantes
Ciudad de México.– La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo lanzó un firme cuestionamiento a la política de seguridad de Estados Unidos, particularmente sobre la práctica de negociar con narcotraficantes, pese a que son catalogados por su propio gobierno como integrantes de “organizaciones terroristas internacionales”. El pronunciamiento se dio durante su conferencia matutina de este jueves, en el marco del caso de Dámaso López Serrano, alias El Mini Lic, quien es requerido por la justicia mexicana por su presunta responsabilidad en el asesinato del periodista Javier Valdez, corresponsal de La Jornada en Sinaloa.

La mandataria exigió una explicación por parte de las autoridades estadounidenses ante la evidente contradicción en sus acciones. “Lo que hemos planteado: se nombra a la delincuencia organizada como ‘terroristas’, tienen una política de no negociar con el terrorismo; y después negocian. Lo tiene que explicar el gobierno de Estados Unidos o las instituciones que pertenecen al Departamento de Justicia o quien tome estas decisiones”, sostuvo.
Sheinbaum subrayó que, además de las órdenes de aprehensión, existen agravios profundos detrás de cada uno de estos casos, y que por ello debe prevalecer una política coherente y respetuosa de los acuerdos bilaterales en materia de seguridad. “Debe haber una política coherente y consistente, es parte del acuerdo de seguridad” entre ambas naciones, enfatizó.
El caso de El Mini Lic ha generado controversia desde que se entregó a las autoridades estadounidenses en 2017, luego de un conflicto con Los Chapitos. A pesar de estar vinculado con el crimen de Javier Valdez —ocurrido el 15 de mayo de ese año— y de contar con una orden de extradición solicitada por la Fiscalía General de la República (FGR), López Serrano fue liberado en 2022 por su colaboración con la DEA. Posteriormente, en 2024, fue nuevamente detenido por tráfico de fentanilo, una droga letal que ha causado más de 100 mil muertes anuales en Estados Unidos.
Ahora, la justicia estadounidense analiza nuevamente la posibilidad de alcanzar un acuerdo con López Serrano, quien se ha declarado culpable del delito. Esta situación ha despertado críticas en México, no solo por la falta de extradición, sino por lo que se percibe como una doble moral en el tratamiento de casos relacionados con el crimen organizado.
Sheinbaum dejó en claro que corresponde a la FGR, encabezada por Alejandro Gertz Manero, dar seguimiento y solicitar la información correspondiente. Sin embargo, reiteró que el respeto a los compromisos internacionales en materia de justicia debe ser recíproco.
La presidenta reafirma con estas declaraciones una postura firme del Estado mexicano: no puede haber impunidad ni complicidad disfrazada de cooperación. México exige verdad y justicia para las víctimas, y coherencia de sus socios internacionales en la lucha contra el crimen organizado.