Reconocen legado y luchas de mujeres afromexicanas: DIF y Conapred unen esfuerzos por la igualdad

Ciudad de México.– En vísperas del Día Internacional de las Personas Afrodescendientes, que se conmemora el 31 de agosto, autoridades federales y especialistas reiteraron su compromiso por visibilizar, reconocer y garantizar los derechos de las mujeres afromexicanas y afrodescendientes, quienes históricamente han enfrentado múltiples formas de discriminación y exclusión social.

Durante la conferencia Los derechos de las mujeres pertenecientes a los pueblos y comunidades afromexicanas y afrodescendientes, organizada por el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF), se destacó que en México hay cerca de 3.1 millones de personas que se autoidentifican como afrodescendientes, con mayor presencia en estados como Guerrero, Morelos, Colima, Quintana Roo y Oaxaca. En el continente, esta población supera los 134 millones, concentrándose principalmente en Brasil, Venezuela, Colombia, Cuba y México.

María del Rocío García Pérez, titular del SNDIF, advirtió que, pese a su profunda herencia cultural y contribución al país, las personas afrodescendientes siguen siendo invisibilizadas y viven en mayor precariedad económica. Citó datos del Banco Mundial que revelan que los afrodescendientes en América Latina tienen 2.5 veces más probabilidades de vivir en pobreza crónica, además de recibir menores ingresos que sus pares no afrodescendientes, incluso con el mismo nivel educativo y experiencia laboral.

En este contexto, García Pérez subrayó que las mujeres afromexicanas enfrentan una “intersección de desigualdades” que limitan su acceso a la salud, educación y desarrollo económico. Sin embargo, resaltó su papel como agentes de cambio en comunidades de estados como Guerrero, Oaxaca y Veracruz, donde lideran procesos de preservación cultural, defensa de derechos y organización comunitaria.

“El DIF Nacional se suma al llamado de la Conapred para erradicar el racismo estructural, visibilizar la riqueza de la herencia afromexicana y empoderar a estas mujeres como protagonistas de su desarrollo. La igualdad sustantiva no es solo un objetivo, es una responsabilidad compartida que nos convoca a escuchar, acompañar y transformar realidades”, expresó.

Por su parte, Georgina Diédhiou Bello, directora de Promoción de Cultura y No Discriminación del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), señaló que en los últimos siete años se ha fortalecido el trabajo con mujeres indígenas y afromexicanas, haciendo énfasis en la necesidad de abordar estas problemáticas desde la interseccionalidad y la valoración de las diferencias.

Hizo un llamado a construir políticas públicas y programas que reconozcan y fortalezcan las contribuciones de estas mujeres, tanto en sus comunidades como en las ciudades, visibilizando sus necesidades específicas en contextos de desigualdad y garantizando la paridad en todos los ámbitos.

Finalmente, Mariana Perla Rojas Martínez, jefa de la Unidad de Atención a Población Vulnerable del DIF Nacional, destacó que el organismo trabaja con un compromiso firme para que las acciones institucionales respondan efectivamente a las necesidades de los sectores históricamente marginados. “Debemos proteger y promover los derechos de esta población no solo desde el marco legal, sino también desde el reconocimiento de su historia, su resistencia y sus valiosas aportaciones al desarrollo de México”, concluyó.

Con estas acciones, el Gobierno de México reitera su convicción de que la inclusión y el respeto a la diversidad son pilares fundamentales para avanzar hacia un país más justo, igualitario y fuerte.