Reconocen al aguamiel de Hidalgo como bien nacional con Indicación Geográfica

Pachuca, Hgo.– En un hecho histórico para las comunidades productoras del maguey, el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) otorgó la Declaratoria de Indicación Geográfica Protegida (IGP) al aguamiel producido en seis regiones del estado de Hidalgo, reconociéndolo oficialmente como un bien nacional.

La declaratoria, publicada el pasado viernes en el Diario Oficial de la Federación, bajo el título “Aguamiel de la Región Aguamielera de Hidalgo”, abarca 44 de los 84 municipios de la entidad, agrupados en seis zonas con tradición milenaria en la extracción y aprovechamiento del maguey: el Valle de Tulancingo, los Llanos de Apan, la Sierra Baja, la Comarca Minera, la Cuenca de México y el Valle del Mezquital.

Con este reconocimiento, el aguamiel hidalguense se convierte en producto protegido por la legislación mexicana, lo que significa que su uso comercial queda regulado y podrá realizarse únicamente con autorización del IMPI. Los productores deberán emplear la denominación oficial y portar en sus etiquetas la leyenda “Indicación Geográfica Protegida” o las siglas “IGP”.

El aguamiel fue descrito en la declaratoria como “líquido ambarino traslúcido, olor característico y sabor dulce afrutado, constituido principalmente por azúcares simples, aminoácidos esenciales, vitaminas y minerales; así como fructooligosacáridos y una diversidad de microorganismos con potencial prebiótico y probiótico”. Esta rica composición lo convierte en un producto único en el mundo por sus propiedades nutricionales y tradicionales.

Los municipios incluidos en la declaratoria abarcan una amplia geografía del estado, desde zonas de la Sierra y el Altiplano hasta los valles semiáridos del Mezquital. Algunos de ellos son: Acaxochitlán, Apan, Actopan, Ixmiquilpan, Mineral del Monte, Huasca, Zempoala, Tula, Huichapan, Tecozautla, entre muchos otros.

Además de proteger el nombre y origen del aguamiel, el IMPI será la instancia responsable de iniciar los trámites necesarios para que esta Indicación Geográfica sea reconocida a nivel internacional, conforme a los tratados y acuerdos comerciales suscritos por México. Este paso permitirá abrir nuevos mercados y fortalecer el posicionamiento del producto hidalguense en el mundo.

La diferencia clave entre una Indicación Geográfica (IG) y una Denominación de Origen (DO) radica en el grado de vinculación del producto con su lugar de origen. Mientras que la DO exige que todas las fases de producción ocurran en la región señalada y que las cualidades del producto se deban exclusivamente a ese entorno natural y cultural, la IG permite que al menos una etapa de la producción se realice en la zona, reconociendo su reputación y características propias sin requerir exclusividad total.

Ambos esquemas comparten la obligatoriedad del uso del sello “Hecho en México”, lo que fortalece la identidad nacional y promueve el consumo de productos con fuerte arraigo en la cultura y territorio mexicano.

Con esta declaratoria, el Gobierno de México impulsa el rescate y protección del patrimonio biocultural de las comunidades productoras de aguamiel, al tiempo que fortalece la economía rural y el reconocimiento del trabajo ancestral de quienes han preservado esta tradición durante generaciones.