Reclamos y críticas en el Poder Judicial tras sorteo de plazas para elección popular en 2025

El reciente sorteo de plazas de magistrados y jueces que serán sometidas a votación popular en junio de 2025 ha generado una oleada de indignación entre integrantes del Poder Judicial. Los juzgadores afectados por la insaculación llevada a cabo por el Senado expresaron en redes sociales su inconformidad, calificando el proceso como un atropello a sus carreras y una amenaza a la independencia judicial. Algunos han advertido que acudirán a instancias internacionales para impugnar la decisión.

Uno de los jueces más vocales en redes fue Iván R. Zamarripa, juez de distrito, quien lamentó que su nombramiento y 18 años de trayectoria en el Poder Judicial de la Federación (PJF) hayan sido reducidos a un sorteo. A través de su cuenta en X (antes Twitter), escribió: “Hoy mi órgano jurisdiccional salió en una tómbola. Así pretenden terminar con mi nombramiento como juez de distrito. Así atropellan 18 años de carrera judicial en el PJF”. Zamarripa señaló que su único compromiso ha sido con el servicio al pueblo de México y que, pese a este “acto infame”, continuará trabajando con independencia y dedicación.

Ante comentarios de usuarios que le sugirieron participar en la elección de jueces, Zamarripa fue tajante: “Si se trata de venderse al mejor postor, para ser electo para un cargo, no es de mi interés participar en este circo que en nada garantizará que quienes lleguen sean los mejores. Sólo llegarán los amigos de los políticos que los pongan en las boletas. Así se destruye al PJF, con más amiguismo que nunca”.

El malestar también fue compartido por magistrados de circuito, como Everardo Orbe, quien ha trabajado 29 años en el PJF. Orbe expresó su frustración en redes sociales: “Con una tómbola aniquilan la carrera judicial y todavía alardean que están transformando al país. Qué manera de retroceder de este gobierno”. Sus palabras reflejan la preocupación de muchos otros magistrados y jueces que ven en esta medida un ataque directo a la autonomía judicial y una forma de consolidar el control político sobre el sistema de justicia.

Por su parte, el magistrado de circuito Carlos Soto, cuya destitución se hará efectiva en 2025, también expresó su descontento. Soto señaló que tras el sorteo, el Senado ya ha comenzado a “destituir magistrados y magistradas” y se pregunta qué será lo siguiente. “Impugnar por las vías legales (nacionales e internacionales) la reforma judicial. Seguir las manifestaciones en la calle o en redes sociales, en contra de la consolidación de la dictadura”, afirmó el magistrado, anticipando una lucha legal y social contra esta reforma impulsada por el actual gobierno.

El sorteo de plazas, realizado el pasado sábado, tiene como objetivo seleccionar los cargos que serán renovados en las elecciones de 2025 y 2027. Sin embargo, muchos miembros del PJF consideran que esta medida socava el principio de independencia judicial y abre la puerta a la politización del sistema judicial, al permitir que jueces y magistrados sean elegidos mediante un proceso electoral en lugar de ser designados con base en su trayectoria y méritos.

Hasta el momento, el Senado no ha publicado la lista definitiva de las 850 plazas que estarán en juego en 2025, lo que ha generado incertidumbre y preocupación en el gremio judicial. La medida, presentada por el gobierno como parte de la transformación del país, ha sido criticada por su impacto en la estabilidad y autonomía del Poder Judicial, mientras que los juzgadores afectados se preparan para emprender acciones legales en busca de revertir esta decisión.

Esta situación refleja el creciente conflicto entre el Poder Ejecutivo y el Judicial, con la independencia de este último en el centro del debate. Mientras tanto, la sociedad observa con atención cómo se desarrolla esta disputa que podría redefinir el sistema judicial en México en los próximos años.