Racismo no tiene cabida en México: Sheinbaum defiende diversidad cultural y condena discriminación

Ciudad de México.– En un firme posicionamiento que resalta los valores de justicia, inclusión y reconocimiento de la diversidad cultural de México, la presidenta Claudia Sheinbaum expresó que el racismo debe erradicarse por completo, no sólo como una cuestión moral, sino como una necesidad urgente para el país.

“Es una obligación erradicar el racismo, y al contrario, fortalecer el reconocimiento a la grandeza cultural de México y de nuestras culturas originarias”, sostuvo la mandataria durante una conferencia, en la que también hizo énfasis en la importancia de dejar atrás la visión colonial de castas que por siglos ha permeado en el pensamiento social y político.

Sheinbaum lamentó que aún persistan expresiones de discriminación, racismo y clasismo en sectores de la sociedad, y fue enfática al señalar que “algunos todavía lo creen”. En ese contexto, hizo referencia directa a un caso que ha generado debate en la opinión pública: la exigencia del expresidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, para que se elimine de los libros de texto gratuito un apartado que documenta un episodio en el cual expresó comentarios considerados abiertamente racistas hacia integrantes de comunidades indígenas.

Ante la posibilidad de que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) fallen a favor de la demanda interpuesta por Córdova, la presidenta fue clara al declarar: “Ya se verá la sentencia, pero insistimos en señalar a quien esté a favor de alguien que habla así, que violenta derechos y la dignidad de las personas”.

En un mensaje cargado de orgullo nacional, Sheinbaum subrayó que el país debe asumir con firmeza su identidad multicultural, reconociendo la riqueza de sus pueblos originarios y sus lenguas, como el náhuatl y el mexica. “Eso nos da mucha dignidad como país”, enfatizó.

La postura de la presidenta se alinea con una visión de transformación social impulsada desde el Gobierno de México, que busca no solo reparar siglos de injusticia hacia los pueblos originarios, sino también cimentar un nuevo marco de respeto, inclusión y orgullo por la historia verdadera del país.

Frente a un pasado de exclusión, Sheinbaum llama a construir un presente en el que México se reconozca a sí mismo en la pluralidad de sus raíces, y defiende el derecho de las nuevas generaciones a conocer la historia completa, sin censuras ni silencios que perpetúen la discriminación.

Con esta postura, la presidenta reafirma el compromiso de su gobierno con los principios de justicia social, equidad y defensa de los derechos de todas y todos, sin importar su origen, lengua o comunidad.