¡Presa Libertad: Nuevo León se Prepara para Enfrentar la Crisis Hídrica!

Desde ayer, la presa Libertad, una monumental obra ubicada en los límites entre los municipios de Linares y Montemorelos, en Nuevo León, se encuentra lista para acopiar líquido gracias al cierre hidráulico que tuvo lugar bajo la supervisión del gobernador Samuel García Sepúlveda y Luis Carlos Alatorre, director del Organismo de Cuenca Río Bravo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Con un avance global del 72 por ciento, esta presa, cuya construcción inició en septiembre de 2020 y se espera concluir para diciembre próximo, está destinada a proporcionar un valioso recurso hídrico a la zona metropolitana de Monterrey. La presa Libertad contará con una capacidad máxima de 221 millones de metros cúbicos, mientras que su imponente cortina alcanza una altura de 52 metros y una longitud de mil 915 metros, consagrándose como la más extensa de América Latina.

La inversión para esta trascendental obra proviene de recursos federales y estatales, sumando más de 7 mil 700 millones de pesos. Se estima que, al entrar en operación, la presa aportará mil 600 litros de agua por segundo a la ávida zona metropolitana de Monterrey, un alivio esperado para los más de 500 mil habitantes que se verán beneficiados con este proyecto.

El gobernador García Sepúlveda expresó su orgullo por el avance significativo que ha experimentado la construcción de la presa Libertad gracias al arduo trabajo de miles de personas involucradas en el proyecto. Resaltó que, al asumir el cargo, solo había uno o dos frentes laborando en la cortina, mientras que en la actualidad se cuentan con 13 frentes operativos las 24 horas del día.

El esperanzador proyecto hidráulico se encuentra en proceso de finalización, faltando únicamente la conclusión del vertedor y la conexión hacia el acueducto Cerro Prieto, lo cual se espera concluir en los próximos meses. Además, el director de Servicios de Agua y Drenaje, Juan Ignacio Barragán, explicó que el cierre hidráulico realizado no abarcaría toda la cortina, ya que están sustituyendo un gasoducto, evitando así posibles contratiempos en caso de fuertes lluvias.

La presa Libertad nace como una respuesta a la crisis hídrica que azotó a Nuevo León en 2022, considerada la peor en tres décadas según especialistas. Ante la falta de agua para la población, se implementó un programa de tandeo en marzo de ese año, que dividió por sectores la metrópoli y estableció horarios para el suministro.

El presidente Andrés Manuel López Obrador respaldó la construcción de la presa Libertad y otorgó un apoyo económico de 2 mil 183 millones de pesos para garantizar el abastecimiento de agua en la zona conurbada de Nuevo León. La presa, junto con el acueducto El Cuchillo 2, cuyos trabajos también fueron financiados en parte por el gobierno federal, buscan mitigar los estragos de la crisis hídrica en la región.

El acueducto El Cuchillo 2, cuyo inicio de construcción se prevé con una inversión de 10 millones de pesos, también será una pieza fundamental para asegurar el suministro del preciado líquido a la ciudadanía, consolidándose como otro esfuerzo para enfrentar la crisis que afectó a Nuevo León en años anteriores.

Ante las expectativas de que el embalse de la presa Libertad se llene gracias a las lluvias pronosticadas para agosto y septiembre, el estado de Nuevo León alberga la esperanza de dejar atrás los momentos críticos relacionados con el abasto de agua, y se encamina hacia un futuro más próspero y sustentable en cuanto a recursos hídricos se refiere.

Es indiscutible que la presa Libertad se presenta como un gigante que traerá consigo un impacto significativo en el bienestar y desarrollo de la región metropolitana de Monterrey. Con el esfuerzo conjunto del gobierno federal, estatal y la sociedad en general, se espera que el panorama hídrico mejore considerablemente, sentando así las bases para un futuro más promisorio en términos de recursos naturales y calidad de vida para todos los neoleoneses.