Peso mexicano se fortalece y roza niveles históricos impulsado por la debilidad del dólar y expectativas globales
Ciudad de México. El peso mexicano continúa mostrando fortaleza y cerró este lunes en su mejor nivel desde agosto de 2024, impulsado por la debilidad global del dólar, el repunte de la inflación en México y la expectativa en torno a los acuerdos comerciales entre China y Estados Unidos.

La moneda nacional registró una apreciación diaria de 0.33 por ciento, ubicándose en 19.0424 pesos por dólar en operaciones al mayoreo, según datos del Banco de México. Con esta jornada, acumula cuatro sesiones consecutivas de ganancias frente al dólar y se encuentra cada vez más cerca de romper el umbral de los 18 pesos por dólar, un nivel que no se veía en meses.
Durante la sesión, el tipo de cambio fluctuó entre un máximo de 19.0800 y un mínimo de 19.0290 pesos por dólar, reflejando la confianza del mercado en la moneda mexicana.
El contexto internacional ha sido clave en este desempeño. La inflación en México subió más de lo esperado, situándose en 4.42 por ciento anual en mayo, por encima del objetivo del Banco de México. Este repunte refuerza las expectativas de que la autoridad monetaria mantenga una política restrictiva, apoyando la cotización del peso.
Al mismo tiempo, el dólar estadounidense se debilitó frente a una canasta de seis monedas internacionales. El índice DXY retrocedió 0.15 por ciento, situándose en 98.99 unidades. La caída del dólar responde, en parte, al optimismo generado por un sólido reporte de empleo en Estados Unidos, lo que a su vez modera las expectativas de una pronta baja de tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed).
Los mercados ahora esperan con atención el dato de inflación de Estados Unidos que se dará a conocer este miércoles. Las previsiones apuntan a un posible incremento de la inflación del 2.3 al 2.5 por ciento en mayo, lo que podría influir en las futuras decisiones de política monetaria de la Fed.
En los mercados financieros, la combinación de una inflación al alza y un mercado laboral robusto en Estados Unidos está retrasando los pronósticos de un recorte de tasas. La rentabilidad de los bonos del Tesoro a 10 años se ubicó en 4.477 por ciento, tras haber cotizado en la mañana en 4.508 por ciento, moderándose luego de alcanzar mínimos de 4.36 por ciento la semana pasada.
Wall Street cerró con resultados mixtos. El índice Nasdaq avanzó 0.31 por ciento, hasta los 19 mil 591.24 puntos, mientras que el S&P 500 y el Dow Jones se mantuvieron prácticamente sin cambios, en 6 mil 5.88 y 42 mil 761.76 puntos, respectivamente.
En México, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) no logró mantener el impulso y cerró con una caída de 0.43 por ciento, ubicándose en 57 mil 813.38 puntos, en línea con la cautela observada en los mercados globales.
En el mercado energético, los precios del petróleo subieron ante la falta de avances en las negociaciones sobre el programa nuclear de Irán y la atención puesta en las conversaciones comerciales entre China y Estados Unidos. El barril de Brent para entrega en agosto ganó 0.86 por ciento, alcanzando los 67.04 dólares, mientras que el WTI para entrega en julio avanzó 1.10 por ciento, a 65.29 dólares.
Por su parte, el mercado de metales mostró estabilidad. El oro, considerado un activo defensivo, se mantuvo cerca de los 3 mil 346 dólares por onza. El bitcoin, en tanto, cotizó alrededor de los 110 mil dólares, a la espera de nuevos factores que impulsen su cotización.
El fortalecimiento del peso es una señal de confianza en la economía mexicana y en la solidez de sus fundamentos macroeconómicos, en un entorno internacional complejo y en constante evolución.