Persiste la Contingencia Ambiental en la Megalópolis por Altas Concentraciones de Ozono

La Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came) anunció la continuación de la fase 1 de contingencia ambiental para el día sábado debido a las elevadas concentraciones de ozono que persisten en la región. Esta medida implica la restricción a la circulación vehicular para vehículos con holograma de verificación cero y doble cero con engomado rosa y terminación de placa 7 y 8, desde las 5:00 hasta las 22:00 horas.

La restricción también afecta a los vehículos con holograma de verificación 2 y aquellos de tipo 1, sin importar su engomado, en un esfuerzo por reducir las emisiones contaminantes y mejorar la calidad del aire. Según el último informe de la CAMe, a las 20:00 horas, se registraron concentraciones máximas de ozono de 170, 164 y 160 partes por billón (ppb) en Tlalnepantla, Atizapán y Cuautitlán, respectivamente. Estas cifras indican un nivel de calidad del aire que varía de mala a muy mala.

La situación es crítica especialmente en la zona Noroeste del Valle de México, donde las condiciones meteorológicas adversas han impedido la dispersión de los contaminantes. Los modelos meteorológicos pronostican la persistencia de un sistema de alta presión sobre el centro del país, que contribuirá a un cielo despejado, alta radiación solar, estabilidad atmosférica y vientos débiles, factores que favorecen la formación de ozono.

Ante esta situación, la CAMe ha emitido recomendaciones para proteger la salud de los habitantes de la Megalópolis, instando a la población a evitar realizar ejercicios al aire libre entre las 13:00 y las 19:00 horas y a posponer cualquier evento al aire libre, deportivo, cultural o de entretenimiento masivo durante estos horarios. Además, se realizará una evaluación continua de la calidad del aire para determinar si las medidas de contingencia deberán mantenerse en los días siguientes.

La ciudadanía está llamada a colaborar con estas medidas para contribuir a la disminución de los niveles de contaminación y proteger la salud pública frente a estos episodios de alta concentración de ozono, que pueden tener efectos adversos significativos en la salud respiratoria y cardiovascular de las personas.