Optimización del uso del agua en la agricultura: IA como herramienta clave para la sostenibilidad

La necesidad de optimizar el uso del agua en la agricultura se ha convertido en un tema crucial ante la creciente demanda global de alimentos. Daniel Madariaga Barrilado, experto en sostenibilidad, destacó la importancia de incorporar tecnologías avanzadas como la inteligencia artificial (IA) para mejorar la gestión de este recurso vital, ya que más del 70 % del consumo mundial de agua está relacionado con la agricultura. En este contexto, la eficiencia hídrica es un desafío urgente.

Madariaga Barrilado explicó que la agricultura de precisión, impulsada por la IA, ofrece herramientas que permiten a los agricultores optimizar sus sistemas de riego. Estas plataformas aprovechan grandes volúmenes de datos históricos y en tiempo real, obtenidos de diversas fuentes, como patrones climáticos, imágenes satelitales y sensores de campo, lo que facilita la toma de decisiones informadas y mejora el uso eficiente del agua.

Una de las aplicaciones más importantes de la IA en este ámbito es la creación de programas de riego optimizados. La capacidad de detectar áreas donde los cultivos reciben agua en exceso o de manera insuficiente es clave para mejorar la calidad y el rendimiento de las cosechas. Madariaga señaló que tecnologías como las imágenes satelitales y los sensores de suelo y plantas permiten obtener lecturas precisas en tiempo real sobre las necesidades de riego, mejorando así la gestión del agua y reduciendo los costos operativos.

Además, mencionó el uso de Modelos de Agricultura Biológica Óptima (MABO) y Medidas Ambientales para la Zona Orgánica (MAZO), estrategias que equilibran la innovación tecnológica con la sostenibilidad ambiental, promoviendo una agricultura más eficiente y responsable con el entorno.

En regiones con escasez de agua, la detección temprana de fallas en los sistemas de riego es crucial. Madariaga Barrilado resaltó el papel de los dispositivos IoT (Internet de las Cosas) integrados con IA, los cuales permiten a los agricultores recibir alertas sobre irregularidades en sus sistemas de riego, facilitando una intervención rápida para evitar pérdidas de agua.

De cara al futuro, el especialista prevé un mayor impacto de las herramientas autónomas impulsadas por IA en la agricultura. Si bien actualmente se utilizan principalmente para apoyar la toma de decisiones, se espera que las máquinas operen de manera autónoma, incrementando tanto la eficiencia hídrica como la productividad agrícola.

Madariaga subrayó que la integración de la IA en la agricultura es esencial para enfrentar los desafíos globales relacionados con la sostenibilidad y la seguridad alimentaria. A medida que la tecnología continúa avanzando, su aplicación en la gestión del agua en la agricultura será cada vez más determinante, garantizando una producción más eficiente y sostenible para las generaciones futuras.