Nuevo golpe al robo de hidrocarburos: FGR desmantela toma clandestina en Tlalnepantla

En un contundente operativo, personal de la Fiscalía General de la República (FGR) logró asegurar una toma clandestina subterránea destinada a la extracción ilegal de hidrocarburos en la colonia Poder de Dios, municipio de Tlalnepantla, Estado de México. Esta acción refuerza los esfuerzos del Gobierno de México por erradicar las actividades ilícitas que ponen en riesgo tanto la seguridad de los ciudadanos como la infraestructura energética del país.

La FGR, a través de la Fiscalía Especializada de Control Regional (FECOR) en su sede del Estado de México, informó que la operación se llevó a cabo tras obtener una orden de cateo emitida por un Juez Federal. El cateo, realizado bajo la supervisión de un agente del Ministerio Público de la Federación, fue ejecutado por elementos de la Policía Federal Ministerial (PFM) y peritos de la institución, quienes se trasladaron al predio ubicado en la mencionada colonia.

En el lugar, las autoridades descubrieron una toma clandestina subterránea que estaba conectada a la red de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex). El personal especializado de Pemex procedió a deshabilitar la instalación ilícita, evitando así posibles fugas de combustible que pudieran ocasionar un desastre en la zona, una comunidad que ya ha sufrido las consecuencias de este tipo de actividades criminales en el pasado reciente.

Este operativo ocurre apenas un mes después de que en la misma colonia Poder de Dios, en la localidad de Tenayuca, se detectara otra extracción ilegal de gasolina. El 24 de julio, las autoridades hallaron un ducto perforado dentro de un domicilio en la calle Mitla, el cual estaba siendo utilizado para sustraer combustible de manera ilegal. Lamentablemente, dicho incidente dejó un saldo trágico de tres personas fallecidas, aparentemente debido a la inhalación de gases tóxicos emanados del hidrocarburo. Además, en ese operativo, personal de Pemex localizó un túnel y una manguera de 40 metros de largo, que estaban siendo utilizados para la extracción clandestina, y se decomisaron aproximadamente 3 mil litros de gasolina.

El predio asegurado en esta última operación ha sido puesto a disposición del Ministerio Público de la Federación, quien se encargará de integrar la carpeta de investigación correspondiente para identificar y procesar a los responsables de estos delitos en materia de hidrocarburos. Este caso subraya la importancia de continuar fortaleciendo la vigilancia y las medidas de seguridad en torno a la infraestructura energética nacional.

El Gobierno de México, a través de la FGR y Pemex, sigue demostrando su compromiso con la lucha contra el robo de combustible, un delito que no solo atenta contra los recursos de la nación, sino que también pone en peligro la vida de miles de personas. Este tipo de acciones reafirman la voluntad del Estado de erradicar estas prácticas ilegales, garantizando la seguridad de los ciudadanos y la protección del patrimonio nacional.