Movimiento Ciudadano ofrece apoyo crítico a Claudia Sheinbaum: Diálogo sin sumisión

En una sesión histórica en el Congreso de la Unión, el partido Movimiento Ciudadano (MC) mostró una postura firme y crítica, pero al mismo tiempo abierta al diálogo, durante la ceremonia en la que Claudia Sheinbaum tomó protesta como la primera presidenta de México. Ivonne Ortega, exgobernadora de Yucatán y actual coordinadora de los diputados de MC, fue la encargada de transmitir el mensaje de su bancada.

Desde la tribuna del Palacio Legislativo de San Lázaro, Ortega ofreció a Sheinbaum “sororidad, pero no complicidad”, subrayando que el apoyo de su partido no se traducirá en una sumisión ciega. En su discurso, Ortega hizo un llamado a la presidenta para que aproveche esta oportunidad histórica y propicie un clima de diálogo democrático que permita la tan anhelada reconciliación nacional tras seis años de profunda polarización política.

La líder emecista destacó que la llegada de Sheinbaum al poder no solo simboliza un logro para las mujeres de México, sino que representa una oportunidad para forjar un futuro de unidad y justicia social. “En Sheinbaum, el país tiene a la primera presidenta mujer, y eso tiene que significar mucho en los años por venir”, declaró Ortega, subrayando la importancia de su liderazgo en esta nueva etapa de la historia nacional.

En su discurso, la exgobernadora de Yucatán también hizo un llamado directo a la nueva presidenta para que asuma el rol de “reconciliadora en jefe” y “comandante suprema del reencuentro” que, a su juicio, México necesita con urgencia. Ortega enfatizó que más allá de las diferencias políticas, la figura presidencial debe ser un puente para cerrar las heridas que la polarización ha dejado en el país.

En el plano legislativo, la diputada de Movimiento Ciudadano también planteó exigencias claras. Ivonne Ortega expresó su esperanza de que Claudia Sheinbaum muestre la misma voluntad política para aprobar importantes reformas sociales, como la reducción de la jornada laboral a 40 horas y la creación de un sistema nacional de cuidados, tal como lo hizo en su momento con la reforma judicial y la militarización de la seguridad pública.

“Aquí están nuestros votos para construir un México nuevo, defender el estado de derecho y a la República”, afirmó Ortega, dejando claro que su bancada está dispuesta a colaborar en iniciativas que fortalezcan al país, siempre y cuando se respeten los principios democráticos y se promueva el bienestar social.

Este mensaje de MC es una muestra clara de que la oposición, aunque crítica, está dispuesta a tender la mano para construir un México más justo y democrático. El partido, bajo la voz de Ivonne Ortega, enfatizó que su apoyo será con miras a fortalecer el Estado de derecho y las instituciones, no a someterse a la línea del gobierno.

De este modo, la sesión de toma de protesta de Claudia Sheinbaum marcó el inicio de una nueva era en la política mexicana, donde la primera mujer en llegar a la presidencia enfrentará el reto de gobernar un país dividido, pero con la posibilidad de encontrar aliados dispuestos a trabajar en pro de un proyecto común de reconciliación y progreso.