Michoacán bajo asedio: hallan desmembrado al tesorero de Zinapécuaro
La violencia volvió a sacudir a Michoacán con el hallazgo del cuerpo desmembrado de Heriberto González, tesorero del municipio de Zinapécuaro, quien llevaba tres días desaparecido. El macabro descubrimiento ocurrió este martes cerca de la caseta de peaje de la autopista México-Guadalajara, en la comunidad de El Tico, informó la Fiscalía General del Estado.
Tres días de incertidumbre
La última vez que se tuvo noticia de González fue en la población de Contepec. Desde entonces, su paradero era un misterio hasta que policías estatales atendieron el reporte del hallazgo de un cuerpo mutilado. Junto a los restos humanos, los perpetradores dejaron un mensaje escrito, cuya autoría y contenido no han sido revelados por las autoridades.
Escalada de violencia en la región
El brutal asesinato del funcionario municipal se suma a una serie de hechos violentos que han estremecido a la región en las últimas semanas. A mediados de noviembre, las alcaldías de Zinapécuaro y Queréndaro fueron atacadas con armas de alto calibre durante la madrugada. Estos atentados dejaron como saldo un policía municipal muerto y daños significativos en los edificios gubernamentales.
Además, apenas el 29 de noviembre, los restos de dos personas ejecutadas fueron encontrados en la carretera Zinapécuaro-Ciudad Hidalgo, cerca de la localidad de Jeráhuaro. Estos eventos reflejan una alarmante espiral de violencia que mantiene a la población en constante temor.
Contexto de inseguridad
Zinapécuaro, como otros municipios de Michoacán, enfrenta un entorno marcado por la operación de grupos delictivos que disputan el control del territorio. La región se ha convertido en escenario de enfrentamientos armados, extorsiones y ataques directos contra autoridades locales, como lo evidencian los recientes incidentes.
Ante este panorama, las autoridades estatales y federales han sido incapaces de garantizar la seguridad en estas comunidades, donde los ciudadanos lidian con un clima de inseguridad creciente.
Reacciones y exigencias
El asesinato del tesorero Heriberto González ha generado indignación entre la población y llamados urgentes de justicia por parte de diversas figuras políticas y sociales. Mientras tanto, la Fiscalía de Michoacán aseguró que se realizan las investigaciones pertinentes para dar con los responsables de este atroz crimen.
Sin embargo, la sensación de impunidad persiste en un estado que ha sido históricamente golpeado por la violencia del crimen organizado. Los ciudadanos demandan no solo resultados en este caso, sino una estrategia integral que devuelva la paz y la tranquilidad a la región.
Una región que clama por paz
El asesinato de Heriberto González no es un hecho aislado, sino una manifestación más de la crisis de inseguridad que afecta a Michoacán. Mientras las comunidades esperan justicia, la violencia sigue marcando la vida cotidiana en una región que, más que nunca, necesita atención urgente por parte de las autoridades.