México debe garantizar una infancia libre de violencia: ONG llaman a frenar el reclutamiento forzado
En el marco del Día de las Manos Rojas, organizaciones defensoras de los derechos de la infancia hicieron un llamado urgente para erradicar el reclutamiento forzado de niñas, niños y jóvenes en México. Según datos de Unicef 2024, más de 250 millones de menores viven en zonas de conflicto en el mundo y cada día cinco niños son reclutados como soldados.
En América Latina, y particularmente en México, esta problemática ha persistido por casi dos décadas, ligada a la lucha contra el crimen organizado. La organización Tejiendo Redes Infancia América Latina y el Caribe destacó que esta práctica no solo viola los derechos de la niñez, sino que también alimenta el ciclo de violencia, donde las víctimas terminan convirtiéndose en agresores.
De acuerdo con un estudio de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), entre 145 mil y 250 mil niñas, niños y adolescentes están en riesgo de ser reclutados o utilizados por grupos delictivos. No solo los grandes cárteles están involucrados, sino también familias delictuales y pandillas, lo que amplía el problema y dificulta su erradicación.
Factores de riesgo y recomendaciones internacionales
Los menores en riesgo suelen vivir en condiciones de pobreza, abandono y violencia familiar. Además, residen en zonas controladas por grupos criminales, lo que facilita su reclutamiento forzado. Ante esta situación, el Comité de los Derechos del Niño de la ONU, a través del Protocolo Facultativo sobre la participación de la niñez en conflictos armados, ha emitido diversas recomendaciones a México, primero en 2011, luego en 2015 y nuevamente en 2024.
Estas recomendaciones incluyen:
- Reconocer y tipificar el reclutamiento forzado como delito en el Código Penal.
- Crear programas de rescate e inserción social para menores afectados.
- Proporcionar tratamiento psicológico especializado a quienes han sido reclutados.
- Construir una cultura de paz en las comunidades y escuelas.
- Modificar la estrategia de seguridad basada en la militarización, promoviendo un enfoque de protección a la infancia.
Críticas a la falta de acción del Estado
A pesar de los llamados internacionales, organizaciones como Tejiendo Redes Infancia lamentaron que, después de 14 años, México no haya cumplido con estas recomendaciones. En este sentido, instaron a las autoridades a replantear el paradigma de seguridad vigente y sumarse a campañas que garanticen una niñez libre de violencia.
Asimismo, criticaron iniciativas legislativas que buscan reducir la edad penal o endurecer sanciones contra adolescentes en conflicto con la ley. Advirtieron que estas propuestas vulneran derechos humanos y van en contra de tratados internacionales que promueven una justicia restaurativa y un tratamiento diferenciado para menores en el sistema de justicia.
El llamado es claro: México debe priorizar la protección de la infancia y atender de inmediato esta crisis humanitaria. La erradicación del reclutamiento forzado no solo es una obligación legal, sino un compromiso moral con el futuro de miles de niñas, niños y adolescentes.