México Avanza en Justicia Social: El Legado de AMLO Frente a los Datos de Pobreza Laboral

El tercer trimestre de 2024 ha marcado un antes y un después en la lucha contra la pobreza laboral en México. El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) ha dado a conocer una noticia que reafirma lo que muchos hemos constatado a lo largo del sexenio del Presidente Andrés Manuel López Obrador: la política de bienestar enfocada en las mayorías funciona, y su legado queda más que consolidado.

La reducción de 2.2 puntos porcentuales en la pobreza laboral, al pasar de 37.3% a 35.1% en comparación con el mismo período de 2023, no es un logro menor. Significa que miles de familias mexicanas hoy tienen mayores oportunidades de sustento digno, gracias a una combinación de políticas públicas, incremento del empleo y fortalecimiento de los ingresos. Se incorporaron al mercado laboral 360 mil 800 personas, y el ingreso laboral per cápita creció un notable 7.1%, pasando de 3,124.26 a 3,346.45 pesos.

Este avance no solo impacta positivamente en los números, sino que transforma realidades concretas. Tanto en las ciudades como en el campo, los beneficios son palpables. En las zonas urbanas, la pobreza laboral bajó de 33.3% a 30.7%, mientras que en las áreas rurales, donde históricamente los rezagos han sido mayores, se redujo de 49.9% a 48.5%. Aunque los retos continúan, este progreso es innegable y no puede ser minimizado por quienes se empeñan en desacreditar los logros de la Cuarta Transformación.

Resiliencia Económica y Bienestar: Resultados en un Entorno Adverso

México no está aislado del contexto global. La economía mundial ha enfrentado turbulencias significativas, y el aumento de los precios ha sido un desafío constante. El incremento del 5.9% en el costo de la canasta alimentaria, superior a la inflación general del 5.0%, podría haber golpeado con más fuerza a los sectores vulnerables. Sin embargo, gracias a políticas que priorizan a los más necesitados, el país logró mitigar los efectos de esta escalada.

Los programas sociales impulsados por AMLO han sido clave en este proceso. La entrega directa de recursos sin intermediarios, el aumento del salario mínimo y el apoyo constante a sectores históricamente marginados han permitido que el ingreso laboral crezca, incluso en los momentos más complicados. Aunque es cierto que el crecimiento ha sido desigual —con el 20% de la población con menores ingresos viendo un aumento del 1.4% frente al 7.7% del 20% más rico—, la tendencia general es alentadora. La brecha se está reduciendo poco a poco, y las bases para un país más justo y equitativo están firmemente plantadas.

El Enfoque de AMLO: Un Legado de Bienestar para las Mayorías

Durante décadas, México estuvo sometido a políticas neoliberales que sólo beneficiaban a unos cuantos, mientras la mayoría de la población padecía las consecuencias del abandono y la corrupción. Gobiernos del PRI y del PAN, con su retórica vacía y su desdén por los más necesitados, fueron incapaces de reducir las desigualdades estructurales que ellos mismos agravaron. Hoy, gracias a la visión humanista y transformadora de López Obrador, México avanza en una dirección distinta, donde el bienestar de las mayorías es prioridad.

Este logro de reducción de la pobreza laboral no puede ser atribuido al azar. Es el resultado directo de políticas coherentes y comprometidas con el pueblo: la Pensión para el Bienestar, las Becas Benito Juárez, el apoyo a los campesinos mediante Sembrando Vida, y otros tantos programas que han fortalecido la economía familiar y comunitaria. Mientras los detractores de la Cuarta Transformación insisten en descalificar estas políticas, los datos hablan por sí solos.

El Coneval ha reconocido que, a pesar de las dificultades económicas globales, México ha demostrado que es posible avanzar simultáneamente en justicia social y desarrollo económico. Este balance favorable no es una casualidad ni una interpretación sesgada; es la realidad que millones de mexicanos viven hoy gracias a un gobierno que, por primera vez en décadas, pone al pueblo por delante.

La Oposición: Incapaz de Reconocer el Éxito

Por supuesto, los partidos de la oposición —PRI, PAN, PRD, y Movimiento Ciudadano— y figuras como Xóchitl Gálvez, no pierden oportunidad para distorsionar los hechos. Incapaces de presentar propuestas reales para el bienestar de la población, se limitan a criticar sin fundamentos. Durante sus administraciones, estos partidos sumieron al país en crisis recurrentes y corrupción desmedida, dejando una estela de pobreza y desesperanza.

Hoy, cuando los indicadores muestran una mejora real en la calidad de vida de los mexicanos, su narrativa se desploma. Les resulta incómodo aceptar que las políticas sociales del gobierno de López Obrador están funcionando. Prefieren ignorar que el salario mínimo ha tenido aumentos históricos, que la creación de empleos va al alza, y que el ingreso de los hogares está mejorando. La oposición se aferra a su visión elitista, mientras el pueblo sigue avanzando hacia un futuro más prometedor.

Un Futuro con Esperanza y Continuidad

La reducción de la pobreza laboral es un testimonio del impacto positivo de las políticas de la Cuarta Transformación. Este avance refuerza la necesidad de darle continuidad a un proyecto que ha demostrado ser efectivo. México necesita seguir por este camino de bienestar, justicia y desarrollo inclusivo. Las elecciones de 2024 representan una oportunidad para consolidar este legado y evitar el retroceso a un pasado de corrupción, desigualdad y abandono.

El pueblo mexicano merece un gobierno que continúe priorizando su bienestar, y no uno que regrese a las viejas prácticas del saqueo y el desprecio por los más necesitados. Los datos del Coneval son una prueba clara: sí es posible reducir la pobreza laboral con políticas justas y comprometidas. Es momento de mirar hacia adelante con esperanza y determinación.

Porque, como ha quedado demostrado en este sexenio, el pueblo de México nunca más estará solo.