México Avanza en Confianza y Equidad, Aun Con Desafíos Pendientes

En una muestra significativa de progreso y resiliencia, México ha logrado destacarse positivamente en el contexto de América Latina post-crisis económica de 2008, según revela el reciente informe “Panorama de las Administraciones Públicas: América Latina y el Caribe 2024”, elaborado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Este documento pone de manifiesto un notable incremento en la confianza hacia el gobierno nacional, alcanzando un 53% en 2022, superando así la tendencia general de la región.

A pesar de estos avances significativos, el informe también señala ciertos aspectos que aún requieren atención, particularmente en lo que respecta al sistema judicial, donde más de la mitad de los ciudadanos expresan insatisfacción. Este dato contrasta con la percepción más positiva en otros ámbitos como la educación y la salud, donde México se posiciona favorablemente en comparación tanto con el promedio regional como con otros miembros de la OCDE.

El informe destaca la importancia de la confianza en los gobiernos nacionales, un indicador que ha disminuido en la región desde la crisis de 2008. Sin embargo, México rompe esta tendencia con un incremento del 41% al 53% en este periodo, evidenciando un crecimiento en la confianza ciudadana hacia su gobierno, un logro que coloca al país en una posición privilegiada, solo superada por Costa Rica en términos de mejoría en este aspecto.

Otro aspecto relevante es el progreso en materia de equidad de género en el ámbito legislativo, donde México sobresale por su política de paridad de género con un 50% de representación femenina, superando el promedio de América Latina y el Caribe. Sin embargo, el informe también señala áreas de oportunidad en la inclusión de pueblos originarios y en el alcance de posiciones de alta dirección por mujeres, donde aún persiste una brecha significativa.

Además, se aborda la problemática de la representación femenina fuera de los escaños legislativos, donde, a pesar de que las mujeres constituyen más de la mitad del empleo público, su presencia en puestos de alta dirección es considerablemente menor que el promedio regional. Esto refleja un desafío en la estructura de poder dentro del sector público, donde las mujeres, aunque mayoría, encuentran limitaciones para ascender en las cadenas de mando.

Este informe, más allá de presentar un diagnóstico, invita a reflexionar sobre los pasos a seguir para fortalecer las instituciones públicas, mejorar la inclusión y la representatividad, y abordar de manera efectiva las insatisfacciones y desafíos pendientes. El camino hacia la consolidación de un México más equitativo y justo requiere de un compromiso continuo, tanto del gobierno como de la sociedad, para construir sobre los logros obtenidos y enfrentar los retos de manera conjunta.