Mazatlán: Epicentro del Espectáculo Celestial
Mazatlán, Sinaloa, se convierte hoy en el escenario privilegiado de un fenómeno astronómico que cautiva a miles de personas: un eclipse total de sol. Este evento, considerado el segundo carnaval del año para el puerto, marca un hito en la historia del país, ofreciendo una oportunidad única que no se repetirá hasta el lejano 30 de marzo de 2052. Con la ciudad llena de emoción y expectativas, las autoridades estatales anticipan la presencia de 750 mil visitantes, todos unidos por el deseo de ser testigos de esta maravilla de la naturaleza.
Verónica Ramírez, astrónoma aficionada y miembro de la Sociedad Astronómica e Investigación Charles Messier, comparte su entusiasmo al vivir su segundo eclipse, tras aquel inolvidable de julio de 1991. Junto a otros cuarenta socios, Ramírez se ha apostado en la azotea de un hotel, no solo para observar el eclipse sino también para compartir este momento histórico a través de transmisiones en vivo, aprovechando las ventajas que ofrece la tecnología actual.
Fernando Tapia, otro astrónomo aficionado, confiesa su emoción ante la posibilidad de que este sea el último eclipse que presencie, dada la rareza de estos eventos. La música de banda, característica del ambiente festivo de Mazatlán, acompaña la celebración, añadiendo un toque de alegría y tradición al evento científico.
Erandi Sánchez, por su parte, ofrece a los paseantes la oportunidad de observar el eclipse a través de potentes binoculares, recalibrando el instrumento constantemente para seguir el movimiento celestial. La expectativa crece mientras se acerca el momento cumbre a las 9:51 a.m. (hora local), cuando se iniciará la “danza cósmica” que posiciona a Mazatlán como el primer punto del planeta en presenciar este espectáculo antes de que continúe su trayectoria hacia Durango, Coahuila, Estados Unidos y Canadá.
La ciudad se ha organizado meticulosamente para este evento, con telescopios dispuestos en varios puntos estratégicos, como el parque de las Ciudades Hermanas, y el Malecón cerrado a la circulación vehicular para facilitar la observación del impacto del fenómeno en la marea. La creatividad de los locales se manifiesta en la oferta de actividades complementarias, desde expediciones marítimas para una vista privilegiada del eclipse hasta sesiones de yoga que prometen una experiencia trascendental.
Este eclipse no solo celebra la curiosidad científica y la unidad en la observación de los astros, sino que también refuerza el papel de Mazatlán como un destino turístico capaz de ofrecer experiencias únicas y memorables. La ciudad se entrega hoy a la ciencia y a la curiosidad, demostrando que la belleza del universo puede ser un poderoso catalizador para la comunidad y el conocimiento compartido.