“Justicia para María Elena”: OCNF exige acción ante impunidad en Oaxaca
Ciudad de México. El Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF) expresó su respaldo a la saxofonista María Elena Ríos, quien alzó la voz en un evento encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo en Oaxaca, denunciando la impunidad y la protección que presuntamente se otorga a su agresor, Juan Antonio Vera Carrizal.
María Elena, sobreviviente de un brutal intento de feminicidio con ácido, manifestó su profundo dolor y desilusión ante un sistema que, en sus palabras, no garantiza justicia para las mujeres en Oaxaca. “Con profundo dolor y desilusión me rindo, las mujeres en Oaxaca no tenemos justicia”, afirmó conmoviendo a la audiencia y despertando la indignación de quienes luchan por la igualdad y la justicia en México.
El OCNF, bajo la dirección de María de la Luz Estrada, calificó como lamentable que una víctima de violencia de género se vea forzada a renunciar a su lucha por justicia debido al desgaste y a la desprotección institucional. “Esto pone en grave riesgo su vida”, advirtió la organización, enfatizando que este caso es un ejemplo claro de cómo la colusión entre agresores y tomadores de decisiones puede bloquear el acceso a la justicia.
Durante años, María Elena Ríos ha señalado múltiples irregularidades en el manejo de su caso, incluyendo retrasos, falta de apoyo y una evidente inclinación del sistema hacia la protección de los agresores. Esta situación ha evidenciado las serias fallas de un sistema que debería priorizar los derechos y la seguridad de las víctimas.
Ante este panorama, el OCNF lanzó un llamado urgente a la Presidencia de la República, solicitando una intervención directa para analizar el caso de María Elena y garantizar una investigación exhaustiva de los obstáculos que han impedido que la justicia se materialice. Asimismo, exigió que las autoridades responsables de perpetuar la violencia y la impunidad enfrenten las consecuencias legales correspondientes.
La organización también destacó que este caso no solo afecta a María Elena, sino que simboliza las barreras sistemáticas que enfrentan muchas mujeres en un país que aún tiene grandes retos en la protección de sus derechos y en la erradicación de la violencia de género.
“A María Elena le decimos: no estás sola. Nos indigna tu cansancio, pero entendemos que es el reflejo de un sistema que sistemáticamente ha abandonado a las mujeres”, expresó el OCNF en un mensaje de solidaridad.
Finalmente, el Observatorio reafirmó su compromiso de seguir trabajando por un México libre de violencia contra las mujeres, un país donde la justicia sea un derecho garantizado y no una excepción.
El caso de María Elena Ríos vuelve a poner sobre la mesa la necesidad urgente de reformas estructurales en el sistema judicial mexicano, así como el compromiso firme de las autoridades para erradicar la impunidad que perpetúa la violencia de género. Su lucha, aunque dolorosa, representa la voz de miles de mujeres que claman por un cambio real.