Inflación en México registra su mejor lectura desde octubre de 2021.

La inflación en México en la primera quincena de abril fue del 6.24 por ciento anual, lo que representa una variación menor a la esperada por los analistas económicos, según el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Esta cifra también representa la mejor lectura desde la primera mitad de octubre de 2021.

En comparación con la quincena anterior, el INPC disminuyó un 0.16 por ciento durante los primeros 15 días de abril. En el mismo periodo de 2022, la inflación se incrementó un 0.16 por ciento.

El descenso de la inflación se debe a la estacionalidad de las tarifas eléctricas y una moderación en los alimentos procesados, lo que permitió que los precios al consumidor en México pasaran de 6.58 a 6.24 por ciento anual de la segunda quincena de marzo a la primera de abril del presente año. Los precios al consumidor en México sumaron seis quincenas a la baja en los primeros quince días de abril.

La última encuesta de Citibanamex estimó que la inflación general de abril sería de un 0.04 por ciento mensual o un 6.32 por ciento anual, según el pronóstico del consenso de analistas.

La inflación subyacente, que determina la trayectoria de la inflación general en el mediano y largo plazo, presentó un aumento de un 0.18 por ciento a tasa quincenal y un 7.75 por ciento a tasa anual. Para la subyacente, los encuestados de Citibanamex estimaron un 0.45 por ciento mensual y un 7.74 por ciento anual, por debajo del 8.09 por ciento observado en marzo.

Los precios de las mercancías subieron un 0.31 por ciento y los de los servicios, un 0.03 por ciento en la inflación subyacente, que excluye de su medición los productos de alta volatilidad de precios como los energéticos y los agropecuarios.

La inflación no subyacente, que incluye productos agropecuarios y energéticos, bajó un 1.22 por ciento quincenal y creció un 1.82 por ciento a tasa anual. A tasa quincenal, los precios de los productos agropecuarios retrocedieron un 0.07 por ciento y los de energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno, un 2.18 por ciento. Esto se debió principalmente a los ajustes en las tarifas eléctricas dentro del esquema de temporada cálida en 18 ciudades del país.