Indignación por sentencia absolutoria en caso de violencia digital: “El sistema judicial nos ha fallado”

Organizaciones del Movimiento Ley Olimpia expresaron su enérgico repudio a la sentencia absolutoria emitida por el juez Francisco Salazar Silva en el caso de Diego N, acusado de alterar imágenes de excompañeras con inteligencia artificial (IA). La decisión del juez, que consideró insuficientes las pruebas presentadas, ha desatado indignación, especialmente al coincidir con los 16 Días de Activismo contra la Violencia de Género.

El Frente Nacional para la Sororidad y Defensoras Digitales, principales impulsoras de la Ley Olimpia, calificaron la resolución como un acto de complicidad. “Hoy el juez decidió mirar hacia otro lado. Decidió ignorar nuestras voces, nuestra verdad y nuestras pruebas. Esta sentencia absolutoria no es justicia, es complicidad, es la viva representación del pacto patriarcal”, denunciaron en un comunicado conjunto.

Pruebas ignoradas y una justicia insuficiente

El caso, que involucró a ocho jóvenes del Instituto Politécnico Nacional como denunciantes, presentó como pruebas más de 166 mil imágenes y 2 mil videos encontrados en la iPad del acusado. Sin embargo, el juez desestimó estos elementos, decisión que Valeria Martínez, abogada de las víctimas, criticó duramente.

“Es incomprensible que un volumen tan significativo de material, que demuestra la alteración de imágenes con IA y su uso para violentar la intimidad de estas mujeres, no sea considerado suficiente. Esta resolución envía un mensaje preocupante sobre la falta de voluntad para combatir la violencia digital”, declaró Martínez.

A pesar del fallo, la abogada anunció que se apelará la decisión. Además, adelantó que el próximo lunes se llevará a cabo una nueva audiencia relacionada con otra de las denuncias contra Diego N.

Violencia digital: un problema invisibilizado

La sentencia absolutoria ha encendido un debate sobre la importancia de abordar la violencia digital como una forma de agresión que afecta gravemente la vida y la dignidad de las mujeres. Para las organizaciones del Movimiento Ley Olimpia, este caso simboliza la resistencia de un sistema judicial que no se adapta a los desafíos de la era digital.

“El juzgador tuvo la oportunidad de hacer historia, de enviar un mensaje claro contra la violencia digital, y la desperdició. Con esta decisión ha gritado al mundo que nuestras vidas y dignidad son un precio aceptable para proteger a los agresores. Pero nosotras no aceptamos ese mensaje”, señalaron.

La Ley Olimpia, implementada en diversos estados de México, busca combatir y sancionar la violencia digital contra las mujeres. No obstante, casos como este demuestran las barreras persistentes para garantizar justicia a las víctimas.

Un llamado a la acción

Las organizaciones hicieron un llamado al poder judicial y a la sociedad en general para no minimizar la violencia digital. En el contexto de los 16 Días de Activismo contra la Violencia de Género, destacaron la importancia de garantizar que estas agresiones no queden impunes.

“Seguiremos luchando, apelando, visibilizando. La justicia no puede seguir ignorándonos. Las mujeres merecemos un sistema que nos proteja, no que nos abandone”, concluyeron.

Este caso no solo expone la urgencia de fortalecer la Ley Olimpia y su aplicación, sino también de transformar un sistema que, para las víctimas, sigue perpetuando la impunidad y el silencio frente a la violencia de género.