¡Impulso a la aviación! Sedena crea Aerolínea Estatal Mexicana para revolucionar el transporte aéreo
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha adquirido otra empresa durante la actual administración. Mediante la publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF), se ha formalizado la constitución de la “Aerolínea del Estado Mexicana”. Este proyecto ha sido preparado presupuestalmente desde enero pasado, tres meses antes de que se discutieran en la Cámara de Diputados los cambios a la Ley de Aviación Civil.
La creación de la Aerolínea del Estado Mexicano da cumplimiento a lo anunciado por el presidente Andrés Manuel López Obrador el 4 de octubre del año anterior. En aquel momento, confirmó la creación de una empresa de transporte aéreo operada por el Ejército y vinculada al Grupo Aeroportuario, Ferroviario y de Servicios Auxiliares Olmeca-Maya-Mexica, el cual también se encuentra bajo el control de la Sedena.
La nueva empresa comienza con un capital inicial de un millón de pesos y tiene la capacidad de llevar a cabo todas las acciones necesarias para promover, explotar y brindar servicios de transporte aéreo regular nacional e internacional de pasajeros, carga, correo o una combinación de ellos. Esto puede realizarse tanto por cuenta propia como a través de personas públicas o privadas. La resolución de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, notificada en el DOF, detalla estas facultades.
Además, la Aerolínea del Estado Mexicano también tiene la facultad de promover, explotar y brindar servicios de transporte aéreo no regular nacional e internacional, en sus diferentes variantes, como el fletamento bajo la modalidad de paquete turístico o de traslado, charter y taxi aéreo. También puede ofrecer servicios complementarios y conexos, así como obtener concesiones, permisos, licencias, autorizaciones y ejecutar todos los actos necesarios para llevar a cabo su objeto social, de acuerdo con sus Estatutos Sociales y otras disposiciones aplicables.
En cuanto a la distribución accionaria, el Banco Nacional del Ejército, Fuerza Aérea y Armada posee el 1% de las acciones representativas del capital social de la “Aerolínea del Estado Mexicano” al haber invertido 10 mil pesos. El resto de los recursos, es decir, 990 mil pesos, provienen del presupuesto de la Sedena.
Los fondos necesarios para poner en marcha la Aerolínea del Estado Mexicano serán proporcionados a través del presupuesto autorizado a la Sedena, con movimientos compensados. Esto significa que no se incrementará el presupuesto regularizable y no se autorizarán recursos adicionales para el ejercicio fiscal actual ni para los siguientes, según explicó la Secretaría de Hacienda.
El 30 de enero, durante la primera sesión ordinaria de 2023, la Comisión Intersecretarial de Gasto Público, Financiamiento y Desincorporación emitió el Acuerdo 23-I-1, mediante el cual se aprobó la constitución de la Empresa de Participación Estatal Mayoritaria denominada “Aerolínea del Estado Mexicano” bajo la dependencia de la Sedena. Posteriormente, el 20 de abril, la Cámara de Diputados aprobó las modificaciones a la Ley de Aviación Civil, estableciendo las bases para la creación de una empresa de este tipo.
Con la aprobación de estas modificaciones legales, se han sentado las bases para la operación y funcionamiento de la Aerolínea del Estado Mexicano. Esta nueva empresa de transporte aéreo, que estará a cargo del Ejército y vinculada al Grupo Aeroportuario, Ferroviario y de Servicios Auxiliares Olmeca-Maya-Mexica, busca fortalecer la capacidad de transporte del país y contribuir al desarrollo económico y turístico de México.
La creación de una aerolínea estatal operada por la Sedena ha sido objeto de debate y controversia. Mientras que algunos argumentan que esta medida fortalecerá la seguridad y la soberanía nacional, otros expresan preocupación por el posible impacto en la competencia y en el mercado de la aviación civil.
Según el presidente López Obrador, la Aerolínea del Estado Mexicano permitirá la reducción de costos y una mayor eficiencia en el transporte aéreo, además de generar empleo y fomentar la conectividad en regiones remotas y de difícil acceso. Asimismo, se espera que esta empresa contribuya a la descentralización económica del país y promueva el turismo nacional e internacional.
No obstante, críticos señalan que esta iniciativa podría representar una competencia desleal para las aerolíneas comerciales existentes, además de generar dudas sobre la capacidad y experiencia de la Sedena para operar una aerolínea. También se plantean interrogantes sobre la transparencia en la asignación de recursos y en la toma de decisiones relacionadas con la empresa.
Ante estas preocupaciones, las autoridades han reiterado que la Aerolínea del Estado Mexicano operará bajo las mismas normativas y regulaciones que rigen a las demás aerolíneas, y se comprometen a garantizar la transparencia y la competencia justa en el sector de la aviación civil.
Por su parte, la Sedena ha expresado su compromiso de garantizar la seguridad y calidad en los servicios de transporte aéreo que ofrecerá la aerolínea estatal. Además, destacan que contar con una empresa de transporte aéreo operada por el Ejército permitirá un mayor control y supervisión de las operaciones, lo cual contribuirá a la seguridad y defensa del país.
La constitución de la Aerolínea del Estado Mexicano representa un paso importante en los esfuerzos del gobierno mexicano por fortalecer la infraestructura de transporte y promover el desarrollo económico. Sin embargo, queda por verse cómo se desarrollará y operará esta nueva empresa, así como cuál será su impacto en el mercado de la aviación civil y en la economía del país.
En los próximos meses, se espera que se realicen las gestiones necesarias para poner en marcha la Aerolínea del Estado Mexicano, incluyendo la adquisición de aeronaves, la contratación de personal y la definición de rutas y servicios que ofrecerá la empresa. Será fundamental seguir de cerca el desarrollo de esta iniciativa y evaluar su impacto en el sector de la aviación en México.