¡Impresionante caída! Inflación en mayo alcanza su nivel más bajo en 21 meses
La inflación en el mes de mayo registró una desaceleración significativa, alcanzando su menor nivel en los últimos 21 meses, según el reporte presentado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). El índice de precios al consumidor mostró una variación del 5.84 por ciento, destacando una disminución en los precios de los energéticos, mientras que los alimentos y bebidas procesadas, así como otros insumos menos propensos a cambios, continuaron en aumento.
En comparación con el mes anterior, la inflación general tuvo una reducción del 0.22 por ciento en mayo, marcando la primera vez en cuatro años que se registra una disminución durante este periodo. Esta baja se atribuye principalmente al componente no subyacente de la inflación, donde se agrupan los insumos más volátiles, especialmente en el rubro de los energéticos.
En detalle, la inflación no subyacente tuvo un crecimiento anual del 1.24 por ciento, siendo los energéticos los que experimentaron una caída del 5.48 por ciento, mientras que el resto de sus componentes mostraron incrementos. Por otro lado, la inflación subyacente aumentó un 7.34 por ciento anual, impulsada principalmente por el incremento en los precios de los alimentos y bebidas procesadas, que alcanzaron un 11.44 por ciento.
En relación al mes de abril, la inflación no subyacente presentó una reducción del 1.88 por ciento en mayo. Durante este periodo, se registró un aumento del 0.25 por ciento en los precios de las frutas y verduras, así como un incremento del 0.31 por ciento en las tarifas autorizadas por el gobierno. Por el contrario, los precios de los energéticos mostraron una disminución del 4.77 por ciento, y los productos pecuarios registraron una reducción del 0.79 por ciento.
Si bien la disminución en los insumos variables ha contribuido a la tendencia a la baja en la inflación general, el aumento en la inflación subyacente podría retrasar cualquier posible relajación de la política monetaria por parte del Banco de México. Actualmente, la tasa de referencia se sitúa en el 11.25 por ciento, y la mayoría de los analistas prevén que se mantendrá en ese nivel durante todo el año 2023.
La inflación subyacente, que representa el componente sólido del índice de precios y tiene una mayor incidencia, aumentó un 0.32 por ciento en mayo en comparación con abril. Ninguno de los insumos que la componen registró una reducción, aunque en conjunto se observó el menor incremento en cuatro años.
El Inegi proporcionó detalles sobre los bienes y servicios que tuvieron un mayor impacto en el índice nacional de precios al consumidor durante mayo. Entre ellos se destacan la papa y otros tubérculos, con un aumento del 13.76 por ciento; la vivienda propia, con un incremento del 0.30 por ciento; las loncherías, fondas, torterías y taquerías, con un aumento del 0.56 por ciento; los restaurantes, con un aumento del 0.65 por ciento; y la naranja, con un incremento del 9.32 por ciento.
Por otro lado, se identificaron algunos productos con reducciones significativas en sus precios durante el mes de mayo. Entre ellos se encuentran la electricidad, con una disminución del 21.22 por ciento; el limón, con una reducción del 23.98 por ciento; el gas doméstico LP, con una disminución del 2.86 por ciento; el pollo, con una reducción del 1.35 por ciento; y el huevo, con una disminución del 2.20 por ciento.
Estos datos reflejan una tendencia mixta en los precios de los productos y servicios durante el mes de mayo. Mientras que los energéticos experimentaron una reducción significativa, los alimentos y bebidas procesadas continúan mostrando un aumento considerable. Esto plantea desafíos para el Banco de México en su objetivo de mantener la estabilidad económica y controlar la inflación.
Con una inflación subyacente en aumento, es probable que el Banco de México adopte una postura cautelosa en relación a la relajación de la política monetaria. Actualmente, la tasa de referencia se mantiene en un nivel elevado del 11.25 por ciento, y se espera que se mantenga sin cambios durante todo el año 2023, según los pronósticos de los analistas.
La evolución de la inflación en los próximos meses será crucial para determinar la trayectoria de la política monetaria y su impacto en la economía. La estabilidad de los precios es un factor determinante en el poder adquisitivo de los consumidores y en la planificación financiera de las empresas.
El Inegi seguirá monitoreando de cerca la evolución de los precios y proporcionando datos actualizados para evaluar el comportamiento de la inflación en el país. Las autoridades económicas, por su parte, estarán atentas a estos indicadores para tomar las medidas necesarias y garantizar un entorno económico estable y sostenible.
En conclusión, la inflación en mayo alcanzó su nivel más bajo en 21 meses, impulsada por la reducción en los precios de los energéticos. Sin embargo, los alimentos y bebidas procesadas continúan aumentando, lo que influye en la inflación subyacente. Esta situación plantea desafíos para el Banco de México en su objetivo de mantener la estabilidad económica. Se espera que la tasa de referencia se mantenga sin cambios durante todo el año 2023, y la evolución de la inflación será fundamental en la toma de decisiones económicas en los próximos meses.