Histórico rezo entre el Papa y el Rey Carlos III en la Capilla Sixtina

Ciudad del Vaticano. En un hecho sin precedentes que marca un hito en la historia de las relaciones entre la Iglesia Católica y la Iglesia Anglicana, el rey Carlos III del Reino Unido se convirtió este jueves en el primer monarca británico en rezar públicamente junto a un Papa desde el cisma anglicano ocurrido hace casi cinco siglos. La ceremonia fue presidida por el papa León XIV en la majestuosa Capilla Sixtina, un espacio emblemático del catolicismo y símbolo de unidad espiritual.

Este encuentro ecuménico representa un gesto profundo de reconciliación entre ambas confesiones cristianas, separadas desde el año 1534, cuando el rey Enrique VIII rompió con Roma y fundó la Iglesia de Inglaterra. Ahora, en pleno siglo XXI, el acto encabezado por el pontífice León XIV y el arzobispo de York, Stephen Cottrell, renueva la esperanza de un diálogo permanente basado en el respeto mutuo, la fe compartida y la defensa común del planeta.

La ceremonia, que tuvo una duración aproximada de 30 minutos, fue un momento de solemnidad espiritual y comunión simbólica. Acompañados por las voces del coro de la Capilla Sixtina y el coro de la Capilla de San Jorge de Windsor, el oficio reflejó la fusión de tradiciones litúrgicas tanto católicas como anglicanas. El eje central de la oración fue la protección de la naturaleza, una preocupación compartida que ha unido a ambas Iglesias en su llamado a cuidar de la creación frente a la crisis climática global.

El rey Carlos III, de 76 años, no solo asistió como jefe de Estado, sino también como gobernador supremo de la Iglesia de Inglaterra, cargo que tradicionalmente representa la autoridad religiosa máxima dentro del anglicanismo. Su presencia en el Vaticano y su participación activa en la liturgia junto al Papa León XIV refuerzan su compromiso con la diplomacia interreligiosa y el respeto a las creencias que unen a millones de personas en el mundo.

Minutos antes del acto litúrgico, el Papa recibió en audiencia privada al monarca británico, en un encuentro cargado de simbolismo y cordialidad. Aunque no se revelaron los detalles de la conversación, trascendió que ambos líderes abordaron temas de interés común como la paz mundial, la justicia social y el papel de las religiones frente a los desafíos contemporáneos.

Este histórico gesto de unidad no solo destaca la apertura del Vaticano bajo el liderazgo de León XIV, sino también el papel conciliador que el rey Carlos III ha buscado asumir en el plano internacional. Con este acto, ambas Iglesias envían un poderoso mensaje de reconciliación, recordando que, a pesar de siglos de separación, la fe y el compromiso con el bien común pueden tender puentes duraderos.