“Hacia una Sociedad del Cuidado: La Cepal llama a enfrentar la crisis de los cuidados en América Latina”

En el marco del Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo, celebrado el pasado 29 de octubre, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) emitió un urgente llamado a la reflexión y la acción para avanzar hacia una sociedad que priorice el bienestar de las personas y del planeta. La crisis de desarrollo que enfrenta América Latina y el Caribe, según la Cepal, está anclada en tres grandes desafíos: limitada capacidad de crecimiento, alta desigualdad y una frágil capacidad institucional. En medio de estos retos, el tema de los cuidados emerge como un pilar esencial para el desarrollo sostenible de la región.

El envejecimiento de la población y los efectos del cambio climático son factores que agravan una crisis de los cuidados que, aunque persistente, sigue siendo insuficientemente atendida. Actualmente, más de 95 millones de personas mayores de 60 años habitan en América Latina, lo que representa el 14.3% de la población. Se espera que esta cifra aumente significativamente para 2050, cuando este grupo podría constituir el 25% de la población, elevando la necesidad de cuidados a largo plazo, especialmente para quienes superan los 80 años.

En este contexto, las mujeres y niñas en América Latina y el Caribe soportan una carga desproporcionada de trabajo de cuidados, tanto remunerado como no remunerado. La Cepal documenta que una de cada cuatro mujeres en la región carece de ingresos propios, casi tres veces más que los hombres, y que la mitad de las mujeres se encuentran fuera del mercado laboral. De estas mujeres, más de la mitad permanece al margen debido a responsabilidades familiares y de cuidado, lo cual obstaculiza su desarrollo económico y perpetúa la desigualdad de género en la región.

La situación es más compleja por la división sexual del trabajo, que sigue relegando a las mujeres a tareas domésticas y de cuidado no remuneradas. Las mujeres destinan casi tres veces más tiempo que los hombres a estas labores, lo cual refleja una desigual distribución de responsabilidades y limita su participación en la vida laboral y económica. Para enfrentar esta situación, la Cepal subraya la necesidad urgente de desarrollar políticas públicas que promuevan la corresponsabilidad entre hombres y mujeres, así como entre el Estado, los hogares, las comunidades y el sector privado.

Estas políticas deben enfocarse en la creación de empleos de calidad en la economía del cuidado, promoviendo servicios de cuidado a largo plazo y reduciendo la carga de trabajo no remunerado en los hogares. La formalización y mejora de las condiciones laborales de las personas dedicadas al cuidado, incluyendo a trabajadoras domésticas y personas migrantes, también es clave para garantizar un trabajo decente y con protección social. La creación de empleos dignos en este sector impulsaría no solo la economía, sino también el bienestar social.

América Latina y el Caribe ha avanzado en la última década en el desarrollo de políticas y sistemas de cuidado, lo que ha permitido consolidar un enfoque normativo innovador que reconoce el cuidado como un derecho fundamental. La Agenda Regional de Género ha impulsado avances significativos desde 2010, cuando el Consenso de Brasilia reconoció por primera vez el derecho al cuidado. Estos compromisos han sido reforzados en encuentros como el Compromiso de Buenos Aires en 2022, reflejando un consenso regional creciente sobre la importancia de este tema.

La Cepal resalta que el cuidado debe entenderse como el cimiento de una sociedad más equitativa y sostenible, donde las necesidades de todas las personas, especialmente las más vulnerables, sean atendidas. La construcción de una sociedad del cuidado no es solo una respuesta urgente ante los desafíos actuales, sino una inversión en el futuro. Este 29 de octubre nos recuerda que actuar ahora es esencial para garantizar un mundo más inclusivo y solidario para las generaciones futuras.