Gobierno aplica estímulo fiscal a gasolinas y diésel para proteger el bolsillo de los mexicanos
Ciudad de México. — En una nueva medida para respaldar la economía de las familias mexicanas frente a los efectos de la inflación global y la volatilidad en los mercados energéticos, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) anunció la aplicación de un estímulo fiscal a la gasolina Magna y al diésel durante esta semana, beneficiando directamente a millones de consumidores en todo el país.
A través de un decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF), la dependencia federal informó que del sábado 6 al jueves 11 de abril, la gasolina de bajo octanaje —conocida comúnmente como Magna— contará con un estímulo fiscal del 11.06 por ciento, equivalente a 0.7143 pesos por litro. Este apoyo fiscal permitirá contener los precios al consumidor, evitando aumentos significativos en un insumo vital para la movilidad diaria de la población y el transporte de mercancías.
Asimismo, el diésel, esencial para el sector del transporte y la producción agrícola, recibirá un estímulo de 0.28 por ciento o 0.0197 pesos por litro. Si bien este apoyo es menor en comparación con el de la gasolina Magna, representa una acción importante para mantener la estabilidad de precios en sectores estratégicos.
Por otro lado, la gasolina de alto octanaje o Premium no contará con ningún tipo de estímulo fiscal en este periodo, de acuerdo con lo publicado en el mismo decreto.
Esta acción se suma al compromiso asumido por el Gobierno de México a finales de febrero de este año, cuando se alcanzó un acuerdo con el sector gasolinero nacional para mantener en 24 pesos por litro el precio de la gasolina regular o verde durante, al menos, los próximos seis meses. Este pacto es reflejo del esfuerzo conjunto entre el sector público y privado para garantizar precios justos y estables para los consumidores mexicanos.
La política de estímulos fiscales a los combustibles forma parte de una estrategia económica integral impulsada por el Gobierno de la República, enfocada en proteger el poder adquisitivo de la población, fortalecer la estabilidad macroeconómica y apoyar a los sectores productivos clave para el desarrollo del país.
Con estas acciones, la Secretaría de Hacienda reafirma su compromiso con la justicia social y la responsabilidad financiera, mostrando que, incluso en un contexto internacional complejo, es posible implementar medidas que prioricen el bienestar del pueblo por encima de intereses especulativos.