Ford suspende previsiones anuales por impacto de aranceles de Trump; pérdidas podrían alcanzar los 1,500 mdd
Detroit. La incertidumbre económica generada por la política arancelaria del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llevó a Ford Motor Company a tomar una decisión sin precedentes: suspender su previsión de ganancias anuales para 2025. La automotriz estadounidense estima que los nuevos gravámenes podrían costarle alrededor de mil 500 millones de dólares en ganancias ajustadas antes de intereses e impuestos (EBIT), afectando significativamente su proyección financiera.

La directora financiera de Ford, Sherry House, explicó que, aunque la compañía con sede en Dearborn, Michigan, estaba en camino de alcanzar su meta de beneficios de entre 7 mil y 8 mil 500 millones de dólares para 2025 —como había anunciado en febrero pasado—, dicha orientación no contemplaba los efectos de los nuevos aranceles. “Estamos centrados en gestionar lo que controlamos”, enfatizó House, destacando que se mantienen enfocados en factores internos como la eficiencia en costos y mejoras en la calidad.
Mientras que otras empresas del sector, como General Motors, han actualizado sus proyecciones con base en el panorama actual, Ford optó por la cautela, suspendiendo sus previsiones hasta contar con mayor claridad respecto al impacto de las medidas proteccionistas y cómo reaccionarán los consumidores ante posibles alzas de precios derivadas de estas políticas.
En el primer trimestre de 2025, las ganancias por acción de Ford se ubicaron en 14 centavos, superando ampliamente los 2 centavos proyectados por analistas de LSEG, aunque muy por debajo de los 49 centavos obtenidos en el mismo periodo del año anterior. El beneficio neto también registró una fuerte caída, al pasar de mil 300 millones de dólares a 471 millones. La empresa atribuyó este descenso a interrupciones en la producción relacionadas con el lanzamiento de nuevos modelos en distintas plantas.
A pesar de la caída en los ingresos del 5 por ciento —que sumaron 40 mil 700 millones de dólares—, Ford superó las expectativas del mercado, que rondaban los 36 mil millones. Esta mejora fue impulsada, en parte, por el aumento en la demanda de vehículos por parte de consumidores que buscan adquirir unidades antes de que los precios suban debido a los aranceles.
La compañía también reveló que los aranceles incrementarían sus costos totales anuales en aproximadamente 2 mil 500 millones de dólares, debido principalmente a importaciones de vehículos desde México y China. Ante este entorno adverso, Ford fue de los pocos fabricantes que ofrecieron incentivos para captar mayor participación de mercado, aprovechando el frenesí de compras que provocó la amenaza de aumentos de precios.
Este escenario refleja el impacto que decisiones de política comercial pueden tener sobre la economía y las empresas, incluso en sectores tan sólidos como el automotriz. Mientras el gobierno de Trump avanza con medidas proteccionistas, Ford busca adaptarse con prudencia y estrategia, enfocada en la eficiencia operativa y la sostenibilidad a largo plazo.