Encinas destaca avances en política migratoria de México

El subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas, aseguró que el gobierno de México ha abordado de manera exhaustiva el fenómeno migratorio, a pesar de los recientes acontecimientos trágicos que han sacudido al país. Hizo referencia al secuestro de 50 migrantes en San Luis Potosí el pasado mes de mayo y al devastador incendio en la estación migratoria de Ciudad Juárez, Chihuahua, donde perdieron la vida 40 personas en marzo de este año.

Encinas, quien participó en la clausura del Encuentro Internacional de Movilidad Humana, resaltó que el respeto a la dignidad y libertad de las personas en movilidad ha sido colocado en el centro de la política migratoria. Aunque no ofreció ninguna ponencia sobre las políticas específicas implementadas por la administración actual, el subsecretario afirmó que se está construyendo un nuevo paradigma que redefine la migración irregular como un fenómeno de integración económica, social y cultural a nivel global.

El funcionario reconoció que aquellos que abandonan sus lugares de origen no lo hacen por elección, sino por necesidad. Factores como la pobreza, la marginación y la persecución política son algunos de los motivos que impulsan a miles de personas a emprender el peligroso viaje hacia tierras desconocidas. Sin embargo, se abstuvo de mencionar que la violencia también es una causa fundamental de la migración en numerosos casos.

Durante su discurso de clausura en el encuentro organizado por la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación, Encinas afirmó que este tipo de foros refuerzan el compromiso del gobierno para brindar asilo y refugio. Además, enfatizó la importancia de lograr un desarrollo equilibrado que permita a las personas encontrar oportunidades en sus naciones de origen, expresando el compromiso de la administración en trabajar arduamente para alcanzar este objetivo.

A pesar de las declaraciones del subsecretario, diversas organizaciones defensoras de los derechos humanos han criticado la postura del gobierno mexicano en relación con el fenómeno migratorio. Han argumentado que, a pesar de los esfuerzos realizados, aún existen desafíos significativos y se requieren acciones más contundentes para garantizar la seguridad y el bienestar de los migrantes.

El secuestro de los 50 migrantes en San Luis Potosí evidenció las vulnerabilidades a las que se enfrentan las personas en movilidad, quienes son presa fácil de grupos delictivos que buscan aprovecharse de su desesperación y falta de protección. Este incidente generó un llamado de atención sobre la necesidad de fortalecer las medidas de seguridad en las rutas migratorias y de brindar una protección adecuada a aquellos que se encuentran en tránsito.

Asimismo, el trágico incendio en la estación migratoria de Ciudad Juárez resaltó las precarias condiciones en las que se encuentran muchos migrantes en México. El siniestro, que se cobró la vida de 40 personas, dejó al descubierto la falta de protocolos de seguridad y el hacinamiento en estos centros de detención. Organizaciones defensoras de derechos humanos han demandado una revisión exhaustiva de las políticas y prácticas en materia migratoria, así como la implementación de salvaguardias más efectivas para evitar tragedias similares en el futuro.

A pesar de los desafíos y las críticas, el gobierno mexicano insiste en que está abordando la migración de manera integral y humanitaria. Se han implementado programas y acciones dirigidos a garantizar los derechos de los migrantes, incluyendo la expedición de visas humanitarias, la ampliación de los programas de refugio y la cooperación con países de origen y tránsito. No obstante, persiste la necesidad de una mayor coordinación, tanto a nivel nacional como internacional, para abordar los flujos migratorios de manera efectiva y proteger los derechos de las personas en movilidad.

En conclusión, el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas, destacó los esfuerzos del gobierno mexicano en la atención del fenómeno migratorio, subrayando el enfoque en el respeto a la dignidad y libertad de las personas en movilidad. Aunque se han logrado avances, los recientes acontecimientos trágicos evidencian la necesidad de seguir trabajando para garantizar la seguridad y el bienestar de los migrantes. Las críticas y demandas de organizaciones defensoras de derechos humanos destacan los retos que aún enfrenta México en materia migratoria. La construcción de un nuevo paradigma que promueva la integración económica, social y cultural a nivel global es un objetivo ambicioso que requiere un compromiso continuo y acciones concretas.