El Peso Mexicano Resiste Frente a la Caída del Dólar y las Decisiónes de Política Monetaria

El escenario económico internacional ha sido testigo de un importante movimiento: el dólar estadounidense entró en un marcado descenso tras las señales de la Reserva Federal (Fed) de posibles recortes en la tasa de referencia para el 2024. A pesar de esta debilidad de la divisa norteamericana, el peso mexicano mostró una presión frente al dólar en la apertura de los mercados locales, en un contexto donde el Banco de México (BdeM) prepara su última decisión de política monetaria del año.

La moneda mexicana registró una depreciación del 0.81%, cotizándose alrededor de 17.3731 unidades por dólar. Gabriela Siller, directora de estudios económicos de Banco Base, explicó que la debilidad del peso se atribuye a un aumento en la compra anticipada de dólares y la toma de coberturas cambiarias cuando el nivel baja de 17.25 pesos por dólar, frenando así la tendencia a la baja del peso mexicano. Además, se anticipa que el BdeM podría adoptar un lenguaje menos restrictivo en su anuncio.

En la última reunión de la Junta de Gobierno del BdeM, se espera que las tasas de interés se mantengan en 11.25%, aunque los inversionistas se mantienen alerta a la guía futura. Mientras tanto, el dólar, medido a través de su índice DXY frente a una canasta de seis monedas internacionales, experimentó una depreciación del 0.68%, ubicándose en 101.792 unidades.

En Europa, la autoridad monetaria decidió mantener las tasas de interés estables en 4.5%, marcando el nivel más alto desde mayo de 2001. Esta decisión viene acompañada de un recorte en las expectativas de inflación.

En cuanto a Wall Street, el ambiente se mantiene positivo con ganancias promedio del 0.50%. Este optimismo responde al alivio de los temores sobre las acciones de los bancos centrales y a las expectativas de descensos en las tasas de interés que habían impulsado el rally bursátil en noviembre. La Fed, evitando un tono más severo de lo esperado, confirmó para 2024 un enfoque más inclinado hacia la reducción de su política monetaria.

Este potencial estímulo macroeconómico, derivado de las rebajas de tasas, también impacta positivamente en las perspectivas de demanda de activos cíclicos como el petróleo. El barril de Brent se recupera, alcanzando los 75 dólares, mientras que el West Texas logra reconquistar temporalmente el nivel de los 70 dólares.

En resumen, el panorama monetario global muestra una serie de ajustes y expectativas que afectan a las principales divisas y mercados. En este entorno, el peso mexicano se mantiene firme, a pesar de las fluctuaciones y cambios en las políticas monetarias internacionales.