El peso cede terreno mientras avanza la reforma judicial en el Congreso
El peso mexicano registró su tercera semana consecutiva de pérdidas, en medio de la volatilidad generada por factores tanto externos como internos. El fortalecimiento del dólar, impulsado por un informe laboral mixto en Estados Unidos, y la incertidumbre política en torno a la reforma judicial en México fueron los principales elementos que influyeron en el desempeño de la moneda.
En operaciones al mayoreo, la moneda mexicana cerró con una depreciación de 6 centavos, es decir, 0.33 por ciento, cotizando en 19.99 unidades por dólar, según el Banco de México. Durante la sesión, el peso rompió nuevamente la barrera de los 20 pesos por dólar, aunque logró mitigar las pérdidas hacia el final de la jornada. En la última semana, el peso acumuló una caída de 1.50 por ciento, equivalente a 29 centavos, mientras que en las tres semanas anteriores la depreciación alcanzó 7.34 por ciento, lo que se traduce en una pérdida de 1.36 unidades frente al dólar.
El deterioro del peso, según Monex Grupo Financiero, responde a la combinación de la incertidumbre política en México y el impacto de los datos económicos de Estados Unidos, los cuales han influido en las expectativas sobre las decisiones de la Reserva Federal en torno a la política monetaria. El informe laboral en ese país mostró un crecimiento del empleo más débil de lo esperado, lo que ha añadido complejidad a las perspectivas económicas.
En el ámbito local, el proceso de reforma judicial que se discute en el Congreso ha generado preocupaciones adicionales. La reforma, que ya fue aprobada en la Cámara de Diputados, comenzará su discusión en el Senado. Entre las modificaciones propuestas se encuentra la elección por voto popular de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte. Esta iniciativa ha generado preocupación entre el sector empresarial y los socios comerciales de México en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), quienes ven riesgos en la posible pérdida de autonomía del Poder Judicial y la influencia de grupos delictivos en el proceso de selección de jueces.
El peso, que durante meses mantuvo el apodo de “superpeso” debido a su fortaleza, ha perdido 17.85 por ciento de su valor desde el cierre de mayo, justo antes de las elecciones del 2 de junio. Este debilitamiento ha sido exacerbado por una constante volatilidad, tanto en el escenario internacional como local.
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) no escapó a la tendencia negativa y cerró con una caída de 1.12 por ciento, ubicándose en 51 mil 83.44 puntos. En términos semanales, la BMV acumuló un retroceso de 1.7 por ciento, marcando también su tercera semana de pérdidas. Esta tendencia fue reflejo del comportamiento de los mercados en Wall Street, donde los principales índices retrocedieron debido a la incertidumbre generada por el informe laboral en Estados Unidos y las expectativas de un recorte en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal.
Por otro lado, los precios del petróleo también se vieron afectados, cerrando la semana con fuertes pérdidas. El crudo Brent cayó 1.63 dólares para ubicarse en 71.06 dólares por barril, mientras que el WTI cedió 1.48 dólares, cerrando en 67.67 dólares. La mezcla mexicana de exportación, por su parte, bajó 1.38 dólares y finalizó la semana en 63.25 dólares por barril, su nivel más bajo desde finales de junio de 2023.
La combinación de factores locales e internacionales sigue generando un entorno de incertidumbre para la economía mexicana, particularmente en el comportamiento del tipo de cambio y los mercados financieros.