Avanza México en educación superior pese a desafíos globales: OCDE
Ciudad de México. En un contexto internacional de avances y nuevos desafíos en materia educativa, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) publicó su Panorama de la Educación 2025, documento que subraya la importancia estratégica de la educación superior como motor de desarrollo y movilidad social en los países miembros, incluido México.

El informe destaca que el 48 por ciento de los jóvenes adultos en los países de la OCDE cuenta ya con un título universitario, el nivel más alto registrado. No obstante, también señala que el crecimiento de la matrícula en educación superior se ha desacelerado: entre 2000 y 2021 el incremento anual fue de un punto porcentual, mientras que desde 2021 es de apenas 0.3 puntos por año.
En este contexto, México ha logrado avances relevantes en el acceso a la educación superior. El porcentaje de personas de 25 a 34 años con estudios superiores pasó de 24 por ciento en 2019 a 29 por ciento en 2024, de acuerdo con el organismo internacional. Además, el porcentaje con al menos una maestría o su equivalente se duplicó en el mismo periodo, pasando del uno al dos por ciento.
Aunque aún por debajo del promedio de la OCDE (16 por ciento con estudios de posgrado), estos avances reflejan el compromiso del Gobierno de México con la ampliación de oportunidades educativas, como lo impulsa la Nueva Escuela Mexicana y la revalorización de la educación pública como bien social y derecho universal.
El informe también muestra que el porcentaje de personas de 25 a 34 años sin educación media completa disminuyó significativamente en el país, al pasar de 49 por ciento en 2019 a 41 por ciento en 2024, en línea con las políticas de inclusión educativa y permanencia impulsadas por la Secretaría de Educación Pública (SEP).
No obstante, se reconoce que persisten retos importantes. México tiene una tasa de matrícula del 60 por ciento entre los jóvenes de 15 a 19 años, por debajo del promedio de la OCDE de 84 por ciento. Asimismo, la cobertura en educación preescolar (niños de 3 a 5 años) es de 66 por ciento, lejos del promedio internacional del 85 por ciento. Sin embargo, el gobierno federal ha reafirmado su compromiso con la atención a la primera infancia y la ampliación de la cobertura en todos los niveles.
En términos de financiamiento, la OCDE reconoce que el Estado mexicano es el principal sostén del sistema educativo. El 83.8 por ciento del gasto total en educación primaria y secundaria proviene de recursos públicos, porcentaje que si bien es inferior al promedio de la OCDE (90.1 por ciento), refleja una prioridad sostenida en el presupuesto nacional.
Pese a una ligera disminución en el gasto por estudiante —de 4 mil 079 dólares a 3 mil 650 dólares entre 2015 y 2022—, el gobierno ha reafirmado su enfoque en la equidad, eficiencia y fortalecimiento de los aprendizajes. En paralelo, se mantiene el compromiso de elevar la inversión en educación como herramienta de transformación social.
La OCDE concluye que, más allá del acceso, es indispensable garantizar el desarrollo de habilidades clave. En este sentido, México se encamina a construir un sistema educativo sólido, incluyente y pertinente, alineado con las necesidades del siglo XXI y con el objetivo de que nadie quede fuera ni atrás.