Avance Histórico para las Comunidades Indígenas en el Estado de México

En un movimiento sin precedentes que refleja el compromiso del Gobierno del Estado de México con la diversidad cultural y la inclusión, las comisiones unidas del Congreso local han aprobado un dictamen que marcará un antes y un después en la historia de los pueblos originarios de la entidad. Este jueves, se anunció la inclusión de 103 nuevas localidades en el listado de comunidades indígenas reconocidas oficialmente, elevando el total a 844 a lo largo y ancho del territorio estatal. Este esfuerzo colaborativo entre diversas instancias gubernamentales y organismos autónomos representa un paso significativo hacia la justicia y el reconocimiento de los derechos de los pueblos indígenas.

El proceso para lograr esta inclusión ha sido exhaustivo y meticuloso, involucrando a entidades como el Consejo Estatal para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas del Estado de México (Cedipiem), la Secretaría de Desarrollo Social y la Consejería Jurídica, bajo la aprobación del titular del Ejecutivo. Este procedimiento jurídico, que también contó con la participación de la Universidad Autónoma del Estado de México y la Comisión Estatal de Derechos Humanos, subraya el compromiso del gobierno estatal con la preservación de la riqueza cultural indígena.

Las nuevas localidades reconocidas se encuentran distribuidas en 16 municipios, algunos de los cuales ya contaban con comunidades inscritas en este registro. Este reconocimiento no solo es un acto de justicia hacia las cinco etnias indígenas de la entidad —mazahua, otomí, tlahuica, náhuatl y matlazinca— sino que también es una afirmación de su derecho a la identidad, la cultura y la autodeterminación.

La iniciativa destacada en el dictamen subraya la obligación del Estado de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos que legalmente corresponden a las comunidades indígenas. Este compromiso incluye la protección de su patrimonio histórico y ancestral, el desarrollo y la continuidad colectiva de su cultura, y la garantía de su derecho a la libre determinación y autonomía. Esto abarca aspectos fundamentales como las formas de convivencia, el acceso a tierras y recursos naturales, la aplicación de sistemas normativos propios, formas de gobierno, representación ante el municipio, y acceso efectivo a la jurisdicción del Estado.

La aprobación de este dictamen por el pleno del Congreso local y su posterior promulgación simbolizarán un hito en la historia de México, al reconocer y valorar la inmensa contribución de los pueblos indígenas al tejido social, cultural y económico del Estado de México. Este es un paso adelante en el camino hacia una sociedad más inclusiva, justa y respetuosa de la diversidad cultural que enriquece a nuestra nación.