Aumento en remesas fortalece economía mexicana durante primeros siete meses del año

El flujo de remesas familiares hacia México continúa siendo un pilar crucial para la economía del país. De acuerdo con el reciente informe del Banco de México (BdeM), de enero a julio de 2024, se registró un ingreso total de 36 mil 940 millones de dólares por concepto de remesas, lo que representa un incremento del 2.88 por ciento en comparación con los 35 mil 905 millones reportados durante el mismo periodo del año pasado.

Este aumento refleja la constante y creciente confianza de los connacionales radicados en el extranjero en la economía mexicana y en el bienestar de sus familias. Las remesas, en su mayoría enviadas desde Estados Unidos, han sido un factor determinante para mitigar los efectos de las fluctuaciones económicas globales y fortalecer el consumo interno en diversas regiones del país.

Durante el mes de julio, los envíos de remesas alcanzaron un total de cinco mil 613 millones de dólares. Aunque esta cifra representa una leve disminución del 0.9 por ciento en comparación con los cinco mil 668 millones de dólares recibidos en el mismo mes del año anterior, sigue siendo una contribución significativa al flujo de recursos hacia el país. Esta ligera baja puede atribuirse a factores estacionales y ajustes económicos naturales, pero no compromete la tendencia general al alza que se ha observado en lo que va del año.

El informe del Banco de México también desglosa la forma en que se han realizado estos envíos. En los primeros siete meses del año, las transferencias electrónicas fueron el medio más utilizado, con un total de 36 mil 572 millones de dólares enviados a través de esta vía. Las órdenes de dinero representaron 71 millones de dólares, mientras que los envíos en efectivo y especie sumaron 296 millones de dólares. Estas cifras subrayan la importancia de la tecnología financiera para facilitar y asegurar el flujo de remesas, al tiempo que destacan la diversidad de métodos que los mexicanos en el extranjero emplean para apoyar a sus seres queridos.

El saldo promedio de las remesas durante este periodo fue de 395 dólares, lo que demuestra un compromiso constante por parte de los remitentes para sostener a sus familias, a pesar de los desafíos económicos que puedan enfrentar en el extranjero.

Particularmente en julio, se realizaron 13 mil 958 operaciones de envío, con un promedio por remesa de 402 dólares, convirtiéndose en el tercer monto más alto registrado en lo que va del año, solo superado por los 419 dólares de junio y los 403 dólares de abril. Este comportamiento reafirma la estabilidad y el flujo constante de recursos que se ha mantenido durante 2024, a pesar de las adversidades globales.

Las remesas continúan siendo un motor esencial para la economía mexicana, respaldando no solo el consumo doméstico, sino también impulsando el desarrollo regional en comunidades que dependen en gran medida de estos recursos. En medio de un contexto económico global incierto, estos flujos financieros aportan una estabilidad vital para millones de familias mexicanas, reforzando el compromiso de los connacionales con sus raíces y el progreso del país.