Polémica Desatada: Acusaciones y Comparaciones en torno a los Libros de Texto Gratuitos

El empresario Ricardo Salinas Pliego, señalado por evasión de impuestos y usura, ha desencadenado una batalla por la evasión de 40 mil millones de pesos en impuestos al gobierno federal. Mientras, su allegado Javier Alatorre, en su concesión mediática, arremetió contra los nuevos libros de texto gratuitos acusándolos de propagar adoctrinamiento comunista.

Unirse a la campaña, Marko Cortés, líder del PAN, adoptó un tono similar al de Hitler en 1933, llamando a los padres a “quemar” o “arrancar” hojas de los libros que consideren nocivas para sus hijos. Acusaciones infundadas de que estos libros llevan un “virus comunista” fueron amplificadas por la Unión de Padres de Familia, que tiene tintes ultraderechistas y católicos.

Es sorprendente que se reviva la alarma del comunismo en libros destinados a niveles preescolar, primaria y secundaria. La noción de contagio a través de estos libros es absurda, ya que requeriría la cooperación de todos los maestros.

Cortés, por su parte, invoca el espíritu de Hitler y Joseph Goebbels en una táctica para atacar a sus enemigos políticos, quizás por temor a perder votos y la mayoría en las elecciones de 2024. Esta estrategia también podría estar relacionada con el pago de impuestos pendientes que Salinas Pliego debe al SAT.

El Presidente Andrés Manuel López Obrador ha establecido un ejemplo de servicio público que contradice las acciones de aquellos que buscan enriquecerse. La polémica se extiende, alimentada por medios contratados para la guerra propagandística. En medio de esta controversia, el verdadero propósito de los nuevos libros de texto gratuitos, que es proporcionar educación equitativa, parece quedar en segundo plano.