¡Agricultores desamparados! Pierden subsidio vital para riego

Pequeños agricultores de Acámbaro, Guanajuato, han sido afectados por la pérdida del subsidio en las tarifas eléctricas para el riego agrícola. Según denuncias de los propios agricultores, el subsidio solo puede aplicarse a aquellos productores que estén inscritos en el padrón de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sader), lo cual ha generado problemas para algunos usuarios.

De acuerdo con datos proporcionados por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), los usuarios que buscan acceder a la Tarifa final de suministro básico de estímulo para el bombeo de agua para riego agrícola con cargo único (9-CU) deben pagar un cargo de 0.700 pesos por kilowatt hora de energía consumida hasta alcanzar la cuota energética establecida por la Sader.

Sin embargo, los pequeños agricultores de Acámbaro han denunciado que, a partir del bimestre de marzo-abril, han perdido el subsidio de energía aquellos que no pudieron demostrar ante la Sader que sus concesiones de pozos estaban en regla. Según relató David Márquez Ayala, especialista económico, en una carta dirigida a esta casa editorial, el costo de la electricidad se triplicó en abril, justo en el momento en que el riego de los cultivos de maíz es más intenso.

Se ha reportado que la Sader habría notificado a los pequeños productores a través de carteles colocados en sus oficinas, mientras que la CFE respondió a los agricultores que solo estaban siguiendo la información proporcionada por el padrón de la Sader. A pesar de que los pequeños productores han entregado la documentación requerida, la tarifa no ha sido corregida, lo que ha generado malestar y preocupación en el sector.

Ante esta problemática, La Jornada se puso en contacto con la CFE y la Sader para obtener una postura oficial, sin embargo, al cierre de esta edición no se había recibido respuesta por parte de ambas instituciones.

En el presupuesto de este año, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) destinó 76 millones 624 mil pesos para subsidios en tarifas eléctricas de uso doméstico y riego agrícola, lo cual representa un incremento del 5 por ciento en comparación con el año anterior.

La CFE ha señalado que en caso de que el consumo energético exceda la cuota asignada anualmente, se aplicarán los cargos correspondientes a la Tarifa de riego agrícola en baja tensión o media tensión, según corresponda. Ambas tarifas son determinadas por la Comisión Reguladora de Energía (CRE).

Según datos proporcionados por la CFE, el año pasado había 134,931 usuarios en el sector de riego agrícola, el cual ocupa el cuarto lugar en consumo energético. Las ventas de energía en dicho sector ascendieron a 5,561 millones de pesos durante el lapso de referencia.

La empresa estatal ha reconocido la existencia de un déficit tarifario, el cual se deriva de la diferencia entre los ingresos facturados al aplicar las tarifas establecidas por la CRE y la SHCP, y los costos totales que determinan el monto del subsidio otorgado por la CFE. Este déficit tarifario ha generado preocupación debido al impacto negativo en la solidez financiera del grupo.

Cabe destacar que el Congreso de la Unión aprobó el año pasado un subsidio anual de 73 mil millones de pesos destinado a usuarios domésticos y de riego agrícola. Sin embargo, en el primer semestre de 2022, se agotó el total aprobado debido a la crisis del gas registrada en el mes de febrero.

La CFE ha admitido que si bien recibe recursos federales para cubrir sectores prioritarios, las transferencias recibidas son insuficientes para compensar las pérdidas de ingresos, lo que ha llevado a un constante deterioro de la solidez financiera del grupo.

La situación actual plantea un desafío significativo para los pequeños agricultores de Acámbaro y, posiblemente, para otros productores agrícolas en el país. El acceso al subsidio en las tarifas eléctricas para el riego agrícola es fundamental para garantizar la viabilidad económica de estas actividades, especialmente para aquellos agricultores de menor escala.

El riego agrícola es una parte vital de la producción de alimentos en México, y es necesario brindar un apoyo adecuado a los agricultores para asegurar la sostenibilidad de esta actividad. La pérdida del subsidio en las tarifas eléctricas pone en riesgo la rentabilidad de los pequeños agricultores y puede afectar su capacidad para mantenerse en el negocio.

Es crucial que las autoridades competentes, como la Sader y la CFE, aborden esta problemática de manera oportuna y encuentren soluciones viables para garantizar que los pequeños agricultores puedan acceder al subsidio en las tarifas eléctricas y continuar con sus labores agrícolas de manera rentable y sostenible.

Asimismo, es importante que se realicen revisiones periódicas y actualizaciones en los procedimientos administrativos para evitar situaciones como la ocurrida en Acámbaro, donde los agricultores perdieron el subsidio debido a problemas burocráticos y falta de comunicación efectiva entre las instituciones involucradas.

En conclusión, la pérdida del subsidio en las tarifas eléctricas para el riego agrícola representa un obstáculo significativo para los pequeños agricultores en México. Es fundamental que se tomen medidas inmediatas para corregir esta situación y asegurar que los agricultores puedan acceder al subsidio de manera adecuada. Además, se requiere una mayor coordinación y comunicación entre las instituciones involucradas para evitar dificultades y brindar un apoyo efectivo a los agricultores. El sector agrícola desempeña un papel fundamental en la economía y seguridad alimentaria del país, y es responsabilidad de las autoridades garantizar su viabilidad y desarrollo a largo plazo.