¡Violencia sin control en Chiapas! OCSS exige detener la guerra contrainsurgente
Tepetixtla, Coyuca de Benítez, Costa Grande – La Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS), con base en la comunidad de Tepetixtla, Coyuca de Benítez, llevó a cabo una protesta ayer bloqueando el puente Coyuca. Los manifestantes expresaron su repudio hacia lo que describen como una “guerra de contrainsurgencia” llevada a cabo por el Estado mexicano y sus grupos paramilitares contra las comunidades bases de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), así como contra los pueblos indígenas y campesinos en el estado de Guerrero.
Mediante un comunicado, la OCSS denunció el encarcelamiento de Manuel Gómez, miembro de la base de apoyo del EZLN, y los ataques perpetrados desde el 27 de mayo en el poblado base de apoyo Moisés y Gandhi por parte de la Organización Regional de Caficultores de Ocosingo (ORCAO), un grupo paramilitar que opera bajo el amparo de los tres niveles de gobierno con total impunidad.
Además, los militantes de la OCSS rechazaron las políticas neoliberales que, según ellos, solo despojan y asesinan a las comunidades que resisten las políticas destructoras que buscan eliminar a los pueblos originarios de México y del mundo. También hicieron hincapié en la creciente influencia de los grupos del crimen organizado en Chiapas y Guerrero, alegando que todo esto tiene como objetivo la destrucción y debilitamiento de las autonomías que los pueblos han construido durante décadas para contrarrestar la muerte y la violencia del sistema capitalista que impera en todo el mundo.
“Compañeros zapatistas, alzamos la voz para decirles que no están solos y que si tocan a uno, nos tocan a todos”, expresaron, advirtiendo que defenderán la autonomía inspirados por el claro ejemplo que les brinda el EZLN.
La OCSS anunció su intención de seguir defendiendo los recursos naturales, como el agua, los bosques, las selvas, los mares y, en general, la madre Tierra. Citando al comandante Emiliano Zapata, afirmaron que la Tierra pertenece a quienes la trabajan y que sin ella no hay vida en este planeta.
Asimismo, se sumaron al llamado del Congreso Nacional Indígena y adoptaron sus exigencias: garantizar la salud del compañero Jorge López Sántiz, base de apoyo zapatista herido por paramilitares de la ORCAO, y brindarle toda la atención necesaria durante el tiempo que sea requerida.
Los miembros de la OCSS también demandaron que cese el ataque armado contra la comunidad de Moisés y Gandhi en Chiapas, y que se respete su territorio autónomo. Solicitaron que se castigue a los autores materiales e intelectuales de estos ataques.
Además, exigieron el desmantelamiento de los grupos armados utilizados para mantener activa y en crecimiento la guerra contra las comunidades zapatistas, así como la liberación inmediata de Manuel Gómez, base de apoyo del EZLN, cuya injusta detención no puede ser olvidada.
La OCSS se une a otras organizaciones y movimientos que exigen el cese de la violencia y la represión en Chiapas. En medio de la lucha por la defensa de los derechos de las comunidades indígenas y campesinas, hacen un llamado a la solidaridad y a la acción conjunta.
En los últimos años, Chiapas ha sido escenario de conflictos y tensiones derivados de intereses económicos, políticos y territoriales. La presencia de grupos paramilitares y la influencia de la delincuencia organizada han exacerbado la violencia y la violación de derechos humanos en la región.
La situación en el poblado base de apoyo Moisés y Gandhi es especialmente preocupante. Los ataques perpetrados por la ORCAO han dejado una estela de dolor y sufrimiento en la comunidad. La OCSS exige justicia para los afectados y el cese inmediato de las agresiones.
La falta de atención por parte de las autoridades gubernamentales ante estos hechos ha generado un clima de impunidad que permite que la violencia continúe. La OCSS hace un llamado urgente a los tres niveles de gobierno para que tomen medidas efectivas para garantizar la seguridad y el respeto de los derechos de las comunidades afectadas.
Es fundamental que se investigue a fondo y se sancione a los responsables de estos actos de violencia. No se puede permitir que los grupos paramilitares actúen impunemente y atenten contra la vida y la integridad de las personas.
La OCSS también destaca la importancia de preservar las autonomías que han sido construidas a lo largo de décadas por las comunidades zapatistas y otras organizaciones. Estas autonomías representan una forma de resistencia y de ejercicio de derechos que debe ser respetada y protegida.
La solidaridad es una herramienta fundamental en la lucha por la justicia y la defensa de los derechos humanos. La OCSS hace un llamado a todas las organizaciones, movimientos sociales y personas comprometidas a sumarse a esta demanda de detener la guerra de contrainsurgencia en Chiapas.
La situación en Chiapas no puede ser ignorada ni silenciada. La violencia y la represión deben cesar, y las comunidades indígenas y campesinas deben poder vivir en paz y con dignidad. Es responsabilidad de todos y todas alzar la voz y exigir un cambio real y duradero.
La OCSS se compromete a continuar luchando por la justicia y la defensa de los derechos de las comunidades en Chiapas. Su resistencia y valentía son un ejemplo para todos, y su llamado a la solidaridad debe ser escuchado y atendido.
En un país donde la desigualdad y la violencia siguen presentes, es necesario unir fuerzas y trabajar juntos para construir un futuro más justo y equitativo. La OCSS y otras organizaciones seguirán alzando la voz y exigiendo un alto a la guerra de contrainsurgencia en Chiapas. La lucha continúa.