¡Histórico acuerdo ferroviario en el Istmo de Tehuantepec impulsa desarrollo y genera empleo en el sureste!

Ferro Sur, empresa perteneciente a Grupo México, y el gobierno federal han firmado un acuerdo de gran relevancia en la noche de ayer. Mediante este convenio, el consorcio cede 180 kilómetros de su concesión en el Istmo de Tehuantepec, específicamente 128 kilómetros entre Medias Aguas y Coatzacoalcos, así como 52 kilómetros de ramales. A cambio, el gobierno ampliará el periodo de concesiones en el istmo hasta el puerto de Veracruz, extendiéndolo de 2036 a 2044. La noticia fue anunciada durante la conferencia presidencial.

El presidente Andrés Manuel López Obrador considera que este acuerdo resulta beneficioso para ambas partes, ya que permite al gobierno recuperar un tramo ferroviario estratégico en la zona del Istmo de Tehuantepec. “Se ha llegado al acuerdo de entregar voluntariamente este tramo de concesión, que es de vital importancia”, afirmó.

Se trata de un proyecto de gran envergadura, pues su objetivo es unir las costas del Pacífico con el Golfo de México. “Son alrededor de 250 o 300 kilómetros. Estamos realizando inversiones y para agosto la nueva vía comenzará a funcionar para el transporte de carga, y más adelante también para pasajeros. Además, estamos rehabilitando la vía hasta Palenque, lo que representa un total de 1,548 kilómetros en los estados de Tabasco, Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo”, agregó el mandatario.

El secretario de Gobernación, Adán Augusto López, brindó más detalles sobre el acuerdo. Explicó que el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales llevó a cabo una valuación que tomó en cuenta los años de concesión y el índice inflacionario. El costo estimado fue de 836.8 millones de pesos, lo cual resultó en una ampliación de 8 años en una de las concesiones ferroviarias de Grupo México.

En el acuerdo se estipuló que, si los trenes de Grupo México desean utilizar el tramo que ha sido reincorporado a la propiedad de la Nación, deberán pagar una tarifa de 4.10 pesos por vagón y 8.15 pesos por locomotora, como reconocimiento del derecho de paso por dicha vía. El secretario también mencionó que las secretarías de Gobernación, Marina y Hacienda firmaron el acuerdo en representación del gobierno.

López Obrador aprovechó la ocasión para destacar que, debido a las negociaciones en curso, también se logró el retiro de una demanda presentada por otra subsidiaria de Grupo México en contra del Tren Maya. El presidente subrayó que, durante su administración, se han reincorporado a la nación un total de 2,000 kilómetros de vías férreas, principalmente en el sureste del país, incluyendo los proyectos del Tren Maya y el Tren Transístmico. Este logro representa un avance significativo en la conectividad y desarrollo de la región.

El acuerdo firmado entre Ferro Sur y el gobierno federal marca un hito importante en la estrategia de desarrollo ferroviario de México. Con la cesión de 180 kilómetros de concesión en el Istmo de Tehuantepec, se fortalece la visión de unir el Pacífico con el Golfo, generando oportunidades económicas y comerciales en la región.

El presidente López Obrador destacó la importancia estratégica de este proyecto y su impacto positivo en la economía nacional. La ampliación del periodo de concesiones hasta 2044 permitirá una mayor planificación y desarrollo de infraestructura ferroviaria en el Istmo, facilitando el transporte de carga y pasajeros. Además, se impulsará la rehabilitación de la vía hasta Palenque, abarcando múltiples estados del sureste mexicano.

La valuación realizada por el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales, que tuvo en cuenta los años de concesión y el índice inflacionario, determinó un costo de 836.8 millones de pesos para el tramo cedido por Ferro Sur. Este monto se tradujo en una extensión de 8 años en una de las concesiones ferroviarias de Grupo México. Estas cifras reflejan el compromiso y la voluntad de ambas partes para llegar a un acuerdo equitativo y beneficioso.

El acuerdo establece que los trenes de Grupo México que utilicen el tramo reincorporado pagarán una tarifa por el derecho de paso. Se estipuló un monto de 4.10 pesos por vagón y 8.15 pesos por locomotora. Esta disposición garantiza el reconocimiento y la contraprestación adecuada por el uso de la vía propiedad de la Nación.

La firma del acuerdo no solo implica la participación de Ferro Sur y el gobierno federal, sino también la colaboración de diferentes secretarías. Las secretarías de Gobernación, Marina y Hacienda se sumaron al pacto, demostrando el compromiso conjunto para impulsar el desarrollo del sector ferroviario en México.

El retiro de la demanda presentada por una subsidiaria de Grupo México contra el Tren Maya también es un logro destacado. Este acuerdo muestra la disposición de las partes para buscar soluciones y promover el avance de proyectos de gran envergadura que beneficien al país en su conjunto.

El presidente López Obrador resaltó el compromiso de su administración para reincorporar a la nación más de 2,000 kilómetros de vías férreas. Estas acciones se han centrado principalmente en el sureste de México, impulsando proyectos emblemáticos como el Tren Maya y el Tren Transístmico. Estas iniciativas representan un importante impulso para la conectividad, el desarrollo regional y la creación de empleo en las zonas involucradas.

En conclusión, el acuerdo firmado entre Ferro Sur y el gobierno federal para la cesión de 180 kilómetros de concesión en el Istmo de Tehuantepec marca un hito significativo en el desarrollo del sistema ferroviario de México. Esta decisión estratégica fortalece la visión de unir el Pacífico con el Golfo y promueve el crecimiento económico en la región. El presidente López Obrador enfatizó los beneficios de este acuerdo, destacando la recuperación de un tramo ferroviario estratégico para la Nación y la ampliación de las concesiones hasta 2044. Con este paso, se impulsará el transporte de carga y pasajeros, así como la rehabilitación de la vía en múltiples estados del sureste mexicano.

El acuerdo también contempla una tarifa justa por el uso del tramo ferroviario reincorporado a la propiedad de la Nación. Los trenes de Grupo México que hagan uso de esta vía deberán pagar 4.10 pesos por vagón y 8.15 pesos por locomotora, reconociendo así el derecho de paso y contribuyendo al desarrollo y mantenimiento de la infraestructura ferroviaria.

La colaboración entre diferentes entidades gubernamentales fue fundamental para llegar a este acuerdo. La participación de las secretarías de Gobernación, Marina y Hacienda refleja el compromiso conjunto para promover el desarrollo del sector ferroviario en el país. Esta colaboración interinstitucional demuestra la importancia estratégica del proyecto y la voluntad de trabajar en conjunto para alcanzar soluciones beneficiosas para México.

El retiro de la demanda presentada por una subsidiaria de Grupo México contra el Tren Maya también es un resultado positivo de estas negociaciones. Esto demuestra la disposición de las partes para encontrar soluciones y avanzar en proyectos de envergadura que impulsen el desarrollo del país.

El presidente López Obrador resaltó los logros de su administración en cuanto a la reincorporación de vías férreas a la nación. En el sureste mexicano, se han reincorporado más de 2,000 kilómetros de vías férreas, lo que incluye proyectos emblemáticos como el Tren Maya y el Tren Transístmico. Estas acciones tienen como objetivo promover la conectividad, el desarrollo regional y la generación de empleo en las áreas involucradas.

En resumen, el acuerdo firmado entre Ferro Sur y el gobierno federal representa un avance significativo en el desarrollo del sistema ferroviario en México. La cesión de 180 kilómetros de concesión en el Istmo de Tehuantepec fortalecerá la conectividad entre el Pacífico y el Golfo, impulsando el transporte de carga y pasajeros. Además, la ampliación de las concesiones hasta 2044 y la colaboración entre entidades gubernamentales demuestran el compromiso de trabajar juntos para el beneficio del país. Con estos esfuerzos, se busca fomentar el desarrollo económico y el progreso en el sureste mexicano, impulsando proyectos estratégicos como el Tren Maya y el Tren Transístmico.