AMLO desmiente espionaje: ¡Su gobierno no espía a nadie!

Encinas, Subsecretario de Derechos Humanos de México, fue víctima de espionaje a través del software Pegasus, desarrollado por la compañía israelí NSO. Ante esta revelación, el presidente Andrés Manuel López Obrador se deslindó de cualquier responsabilidad y aseguró desconocer quién fue el autor de esta acción. Enfatizó que su gobierno no realiza labores de espionaje y pidió no darle importancia a este tipo de asuntos.

Tras el informe del diario estadounidense The New York Times, que afirmaba que Encinas había sido espiado mientras investigaba abusos cometidos por las fuerzas armadas, el presidente reveló que había conversado con el funcionario sobre el tema. Durante su conferencia de prensa matutina, López Obrador comentó: “Le dije que no le diera importancia porque no había ninguna intención de espiar a nadie”.

Sin embargo, al ser cuestionado directamente sobre si Encinas fue espiado, el presidente respondió con incertidumbre: “No sé”. Aclaró que Encinas había confirmado que posiblemente había sido objeto de espionaje, pero desconocía quién era el responsable. López Obrador señaló que en el pasado todos espiaban y continúan haciéndolo, refiriéndose a prácticas anteriores en el país.

El mandatario también se refirió al reciente hackeo sufrido por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y planteó la posibilidad de que el empresario Claudio X González estuviera involucrado. Asimismo, cuestionó quiénes podrían estar financiando estas acciones, si se trataba de mexicanos o extranjeros.

López Obrador enfatizó que no se le debe dar importancia a estos acontecimientos y recalcó la importancia de no espiar a nadie. Hizo referencia a la época de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública, cuando el espionaje era común y los medios de comunicación, tanto nacionales como internacionales, guardaban silencio al respecto.

En respuesta a las preguntas persistentes sobre si el espionaje a Encinas se realizó a través de Pegasus, el presidente declaró que no tenía esa información. Ante la posibilidad de realizar una investigación al respecto, López Obrador reiteró que su gobierno no realiza labores de espionaje.

El presidente también mencionó que, en dos ocasiones anteriores, había presentado informes sobre sus actividades como director del Instituto Indigenista en Tabasco en 1979. Además, reveló que frente a su casa en Villahermosa había un vehículo utilizado para actividades de espionaje.

Asimismo, López Obrador aseguró que este tipo de acciones se repitieron incluso durante las pasadas elecciones, presentando pruebas de que su familia fue espiada. Afirmó que sus adversarios políticos son hipócritas al denunciar el espionaje, considerando su historial.

En resumen, el presidente López Obrador rechazó cualquier responsabilidad en el espionaje a Alejandro Encinas y afirmó desconocer quién fue el autor de esta acción. Aseguró que su gobierno no realiza labores de espionaje y pidió no darle importancia a este tipo de incidente. Enfatizó que es fundamental respetar los derechos humanos y destacó que en su gobierno no se practican la tortura ni se cometen masacres, a diferencia de administraciones anteriores.

El presidente López Obrador recordó su experiencia personal en cuanto al espionaje, mencionando que ha sido objeto de vigilancia en múltiples ocasiones. Incluso, reveló que durante la pasada elección presidencial, tanto él como su familia fueron espiados. Afirmó que existen pruebas de estas prácticas y señaló la hipocresía de sus adversarios políticos al denunciar el espionaje.

En conclusión, el presidente Andrés Manuel López Obrador deslindó a su gobierno de cualquier responsabilidad en el espionaje sufrido por el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas. Afirmó desconocer al autor de esta acción y reiteró que su gobierno no realiza labores de espionaje. Hizo hincapié en la importancia de respetar los derechos humanos y recordó su propia experiencia personal en cuanto al espionaje. Aseguró que su gobierno se distingue por no practicar la tortura ni cometer masacres, a diferencia de administraciones anteriores.