¡Revolución energética en México! ¿Será posible alimentar el país solo con energías renovables?
El Sistema Eléctrico Nacional (SEN) se enfrenta a desafíos en cuanto a su alimentación con energías renovables, según reconoció la Cámara Nacional de Manufacturas Eléctricas (Caname). Durante la presentación del Simposium Internacional de la Energía 2023, Salvador Portillo Arellano, presidente de Caname, admitió que, desde un punto de vista técnico, la idea de alimentar un sistema eléctrico únicamente con energías limpias es errónea.
Uno de los argumentos planteados por el sector privado para oponerse a la reforma eléctrica propuesta por el Poder Ejecutivo Federal en 2022 fue la necesidad de abastecer al SEN con electricidad proveniente de fuentes energéticas limpias y reducir el uso de fuentes más contaminantes.
De acuerdo con los datos de la Secretaría de Energía (Sener), entre enero y diciembre del año pasado, el 29% de la electricidad utilizada por el SEN provenía de fuentes renovables, mientras que el 70% era generado a partir de fuentes fósiles.
La información oficial revela que la generación fotovoltaica, obtenida a través de celdas solares, representó el 6.3% del total el año pasado, seguida de la generación eoloeléctrica con un 5.8%, la generación geotérmica con un 1.5%, y la generación hidroeléctrica con un 11%.
Portillo Arellano comentó que el SEN no puede depender exclusivamente de las energías renovables en la actualidad. “Todavía no estamos tecnológicamente preparados. Como país, estamos buscando una matriz de generación más amplia y diversa”.
Explicó que actualmente el sistema eléctrico del país se basa en la generación de electricidad a través de ciclos combinados, los cuales utilizan gas y no se pueden eliminar del esquema.
El presidente de Caname señaló que las fuentes renovables son intermitentes y planteó el problema de generar energía cuando no hay suficiente sol o viento. Además, mencionó que no existe una forma eficiente de almacenar la energía generada por granjas fotovoltaicas y parques eólicos.
“Aunque en algún momento encontraremos un método de almacenamiento más adecuado, en este momento dependemos del litio para almacenar megavatios”, añadió. Portillo Arellano también destacó que serían necesarias inversiones gigantescas para lograr almacenar la cantidad de energía utilizada en México.
En relación a las soluciones potenciales, mencionó que entidades como Nayarit aún tienen capacidad para construir más plantas hidroeléctricas, lo cual “contribuiría en gran medida al sistema”. Además, no descartó la posibilidad de considerar centrales nucleares, ya que pueden proporcionar un suministro de energía constante.
En resumen, la Caname reconoce que el SEN enfrenta desafíos para ser alimentado únicamente con energías renovables debido a su dependencia actual de fuentes fósiles y la falta de tecnología adecuada para el almacenamiento de energía intermitente. Aunque se destaca el avance de las energías renovables en el país, se señala la necesidad de diversificar la matriz de generación y se considera la posibilidad de construir más plantas hidroeléctricas en lugares como Nayarit. Asimismo, no se descarta la opción de evaluar la implementación de centrales nucleares para garantizar un suministro constante de energía.
La Caname destaca que, si bien las energías renovables son una parte importante de la transición hacia un sistema eléctrico más limpio, en la actualidad no es factible depender exclusivamente de ellas debido a limitaciones tecnológicas y de almacenamiento. La intermitencia de fuentes como la solar y la eólica plantea un desafío para garantizar un suministro eléctrico constante.
Es importante señalar que el SEN ha logrado incrementar el uso de energías renovables en los últimos años, con un 29% proveniente de fuentes limpias en el año pasado. Sin embargo, aún queda un largo camino por recorrer para alcanzar una mayor penetración de estas fuentes en el sistema.
El presidente de Caname hace hincapié en la necesidad de buscar una matriz de generación más amplia y abierta, que combine diferentes fuentes de energía para garantizar la estabilidad del sistema. Además, resalta la importancia de seguir investigando y desarrollando tecnologías de almacenamiento más eficientes que permitan aprovechar al máximo la energía generada por fuentes renovables.
En conclusión, si bien el avance hacia un sistema eléctrico basado en energías renovables es una meta deseable, la Caname reconoce que el SEN actualmente no puede depender exclusivamente de ellas debido a limitaciones tecnológicas y de almacenamiento. Se destaca la necesidad de diversificar la matriz de generación y considerar otras fuentes, como la hidroeléctrica y potencialmente las centrales nucleares, para garantizar un suministro eléctrico confiable y sostenible.