México cumple objetivo de Reforma Eléctrica al adquirir 13 plantas de generación a Iberdrola
Hace casi un año, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador presentó una iniciativa de reforma constitucional en el sector energético, con el objetivo de dar prioridad a la compañía eléctrica estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE) sobre las entidades privadas. Sin embargo, el proyecto de ley fue rechazado por el Congreso en abril de 2022 debido a las quejas de empresas extranjeras y las preocupaciones sobre el acuerdo T-MEC con Estados Unidos y Canadá.
No obstante, la reciente adquisición de 13 plantas de generación de la empresa española Iberdrola permitirá a la CFE producir el 55,5% de la electricidad del país, logrando uno de los objetivos de la fallida reforma. Expertos han descrito la compra como rentable, ya que la CFE puede aumentar la generación en áreas donde se espera que la demanda crezca en los próximos años sin afectar la competencia en el mercado eléctrico nacional.
Arturo Carranza, analista del sector energético, afirmó que la adquisición respalda la política y estrategia energética de México, al mismo tiempo que refuerza el modelo de negocio de la CFE. El movimiento también se alinea con el objetivo de la reforma rechazada de modificar los términos de la generación eléctrica y dar a la CFE una mayor participación en el mercado.
Sin embargo, la compra aún requiere la aprobación de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) de México. Carranza cree que esto no tendrá un impacto significativo. La capacidad excedente de la CFE en la producción de gas natural es una ventaja adicional, lo que proporciona flexibilidad para adaptarse a las futuras demandas de energía. Esta adquisición destaca los esfuerzos del gobierno mexicano por aumentar su control sobre el sector energético, y queda por verse cómo afectará las relaciones del país con empresas de energía privadas y gobiernos extranjeros.