Migrantes enfrentan barreras cada vez más altas en su intento de cruzar la frontera de EU y México
Miles de migrantes a lo largo de la frontera de Texas se enfrentan a una serie de obstáculos cada vez más grandes para alcanzar sus objetivos. El gobernador de Texas, Greg Abbott, es un conocido antimigrante y ha colocado miles de piezas circulares de alambre de púas, decenas de cajas de tráiler y la inverosímil altura de la propia muralla en la frontera para impedir el paso. A lo largo de kilómetros, hay cámaras y drones para detectar cualquier intento de cruzar la frontera de manera ilegal. Los coyotes, traficantes de personas, conocen las mañas y hasta los cambios de turno de la migra, lo que aprovechan para desarrollar su trabajo. Reportan que todo el día hay halcones vigilando diferentes puntos de la zona para detectar puntos frágiles por los cuales es posible cruzar. En la parte montañosa de la franja fronteriza, se han detectado agujeros hechos intencionalmente sobre las murallas de metal, por los que cualquier persona podría colarse a suelo estadunidense.
Los pobladores de la región se quejan de la corrupción de los gringos y los coyotes que operan para traficar con las personas vulnerables. La Patrulla Fronteriza ha pedido a los migrantes que crucen de manera regular y que no se dejen engañar por los polleros, que son parte del crimen organizado y que solamente buscan extraer ganancias sin importarles la vida de las personas. La noche es larga y la gente se refugia como puede. A unos metros del puente fronterizo, decenas de migrantes -niños, mujeres y hombres- se cobijan bajo el estacionamiento del palacio municipal.