Exigen justicia por asesinato de dirigente limonero en Michoacán

Ciudad de México. — La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo lamentó profundamente el asesinato del dirigente de Citricultores del Valle de Apatzingán, Bernardo Bravo Manríquez, y aseguró que se esclarecerá este crimen con la colaboración de autoridades federales y estatales. Durante su conferencia matutina dijo que las instancias de seguridad trabajan coordinadas con la Fiscalía General de Justicia de Michoacán para esclarecer los hechos.

En la reunión del gabinete de seguridad, que se realiza de lunes a viernes antes de la mañanera, el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, presentó un informe amplio sobre el homicidio de Bravo Manríquez. García Harfuch informó que, derivado de las investigaciones por el asesinato, fue detenido Rigoberto N, acusado de extorsionar a productores de limón en Apatzingán y señalado como posible sucesor de Gerardo N, alias La Silla, aprehendido en febrero pasado.

La presidenta pidió que el secretario de Seguridad emita un comunicado sobre la protección que tenía el dirigente y las medidas de resguardo para su familia. Sheinbaum subrayó que la investigación toma en cuenta las denuncias que Bernardo Bravo realizó en torno al “coyotaje” en la comercialización del limón en Michoacán y la presión del crimen organizado, y que en este caso “tiene que haber justicia”.

Por su parte, el fiscal general de Michoacán, Carlos Torres Piña, informó que las primeras indagatorias señalan que Bernardo Bravo fue asesinado en un lugar distinto al sitio donde su cuerpo fue localizado. El cuerpo, abandonado en un vehículo sobre la brecha Apatzingán-Tepetates, presentaba dos golpes y un disparo en la cabeza; los peritajes forenses estimaron que falleció aproximadamente diez horas antes de ser hallado.

Torres Piña detalló que, según videos de cámaras de seguridad, Bravo Manríquez salió el domingo por la mañana de Morelia en un vehículo blanco con destino a Apatzingán, cambió de unidad y acudió solo a una reunión en la localidad de Cenobio Moreno. Todo indica que fue asesinado en ese poblado o durante el regreso a la cabecera municipal. El automóvil en que viajaba fue localizado sin impactos visibles, aunque con residuos de sangre en el cristal trasero.

La SSPC precisó que al tomar conocimiento del homicidio, agentes federales y estatales se trasladaron al sitio y pusieron en marcha un dispositivo de seguridad que permitió identificar el vehículo en el que viajaba Rigoberto N y su detención, en un operativo en Michoacán encabezado por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, en coordinación con la fiscalía estatal y autoridades del gabinete de Seguridad federal y del gobierno del estado.

El comunicado oficial destacó que no se localizaron casquillos ni pertenencias personales en el sitio del hallazgo y que ya se solicitó la declaración de los escoltas asignados al dirigente, quienes fueron avisados la mañana del domingo por Bravo de que los recogería antes de viajar a Apatzingán. El Gobierno refrenda su compromiso de investigar a fondo y dar justicia a la familia de Bernardo Bravo Manríquez.