Empresariado respalda estrategia contra la extorsión: “el Estado ha escuchado”
La Estrategia Nacional contra la Extorsión, anunciada recientemente por el Gobierno de México, ha recibido el respaldo contundente del sector empresarial, representado por la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur) y la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), quienes celebraron la iniciativa como un avance fundamental en la lucha contra un delito que ha generado pérdidas por más de 26 mil millones de pesos solo en 2024.

Desde el ámbito patronal, se destacó que esta estrategia, que incluye una iniciativa de reforma para tipificar adecuadamente el delito de extorsión, “representa un paso indispensable frente a un delito que afecta gravemente al sector productivo y vulnera la seguridad de millones de personas”. Datos oficiales subrayan la magnitud del problema: diariamente, 32.3 personas son víctimas de extorsión en el país.
Coparmex informó que el 12.8 por ciento de sus empresas afiliadas han sido víctimas de este delito, en su mayoría a través de llamadas telefónicas (70.5 por ciento). Esta modalidad ha creado un clima de incertidumbre y amenaza, especialmente para las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes), que son el corazón de la economía nacional al generar el 65 por ciento de los empleos. Para este sector, la extorsión representa no solo un riesgo económico, sino un freno para su desarrollo y expansión.
El organismo empresarial subrayó la urgencia de aprobar una Ley General de Extorsión que articule las acciones del ámbito federal y local, establezca penas claras y elimine las denominadas “puertas giratorias”, que permiten la reincidencia delictiva. Asimismo, consideró esencial la creación de Unidades Antiextorsión locales, dotadas de personal capacitado, legislación pertinente y capacidad de respuesta inmediata.
En su análisis, Coparmex advirtió que, aunque muchas extorsiones telefónicas no llegan a concretarse, generan altos niveles de ansiedad, miedo e incluso impacto psicológico entre las víctimas. Por ello, la estrategia debe contemplar atención especializada para quienes enfrentan esta forma de violencia, que más allá del daño económico, trastoca la tranquilidad y dignidad de las personas.
“La extorsión no puede seguir siendo parte de la normalidad”, enfatizó Coparmex, reiterando su disposición a colaborar activamente con el Estado en la construcción de soluciones que resguarden la integridad de ciudadanos y empresas.
Por su parte, la Concanaco-Servytur fue enfática al señalar que “la extorsión no es solo un delito económico, es una forma de sometimiento social y territorial”. Celebró que por primera vez se impulse una reforma estructural que deje de culpar a las víctimas y reconozca el deber del Estado de perseguir este delito con toda la fuerza de la ley.
Octavio de la Torre de Stéffano, presidente del organismo, afirmó: “La extorsión no solo distorsiona el mercado: cobra vidas, encarece productos y destruye la confianza. Perseguirla de oficio no es solo una medida jurídica: es un acto de justicia, de memoria y de Estado. Desde el sector productivo, desde los negocios familiares hemos exigido esta reforma durante años, porque sabemos lo que significa operar bajo amenaza. Hoy reconocemos que el Estado ha escuchado”.
Con esta estrategia, el Gobierno de México da un paso firme hacia la protección integral de la ciudadanía y del tejido productivo nacional, combatiendo de raíz una práctica delictiva que ha lastimado a familias y emprendedores durante años.