Acapulco se fortalece ante huracán Erick: gobierno instala centro de mando y activa alerta naranja

Acapulco, Gro.– Entre el calor sofocante de 32 grados y una humedad del 71 por ciento, la ciudad de Acapulco vivió una calma tensa y engañosa, mientras se preparaba para recibir el impacto del huracán Erick. Pese a que el cielo se mantenía parcialmente soleado, la alerta entre la población era evidente, especialmente tras una tormenta local que azotó entre las 2 y las 5 de la mañana del miércoles.

Desde el martes, decenas de embarcaciones menores, incluidas las icónicas lanchas de fondo de cristal, fueron remolcadas hasta la orilla de la playa Manzanillo, en la tradicional zona del puerto, donde sus propietarios las aseguraron con cuerdas, troncos y lonas. Paralelamente, trabajadores reforzaron con tapias de madera y lonas los comercios de la costera Miguel Alemán, en una doble estrategia para resistir los efectos del meteoro y prevenir actos de rapiña.

En respuesta a la emergencia, la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y la coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa, encabezaron la instalación de un Centro de Mando en Acapulco. Desde este punto se coordina la atención a la ciudadanía en toda la entidad. Como parte de las acciones preventivas, se habilitaron 582 albergues temporales en las ocho regiones del estado. En el puerto, ya comenzó a operar uno de los 31 refugios activos, con la recepción de la primera ciudadana en la secundaria técnica 152, ubicada en la colonia Dragos.

El gobierno estatal informó al mediodía del miércoles que el semáforo de alerta preventiva fue elevado a color naranja, lo que representa un nivel de peligro alto. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) confirmó que a las 12:00 horas Erick se intensificó rápidamente a huracán categoría dos, con vientos máximos sostenidos de 155 kilómetros por hora y rachas de hasta 195, localizándose a 345 kilómetros al sureste de Punta Maldonado y con desplazamiento al noroeste a 15 kilómetros por hora. Se espera que evolucione a categoría tres durante la madrugada del jueves.

En previsión a los posibles estragos, personal de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha comenzado a desplegarse en colonias estratégicas de Acapulco. Técnicos especializados, llegados desde distintas regiones del país, se preparan para responder de manera inmediata ante cortes eléctricos o daños a la infraestructura.

Mientras tanto, la población toma sus propias medidas. Largas filas se observaron en diversas sucursales bancarias del centro, reflejo de la precaución y preparación de los ciudadanos. Las clases escolares fueron suspendidas desde el miércoles y la medida se mantiene vigente para este jueves.

Para resguardar el orden público, autoridades estatales y municipales, en coordinación con la Guardia Nacional, han dispuesto presencia policial en gasolineras, supermercados y centros comerciales, con el fin de prevenir actos vandálicos y garantizar la seguridad.

Acapulco demuestra una vez más su capacidad de organización y resiliencia ante los embates de la naturaleza, respaldado por un gobierno comprometido que actúa con anticipación, responsabilidad y solidaridad hacia su gente.