México impulsa regeneración ecológica global desde los océanos
Con liderazgo y firmeza, México reafirmó su papel como defensor del medio ambiente a nivel internacional durante la Tercera Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos, al presentar una ambiciosa agenda de compromisos voluntarios orientados a la regeneración ecológica, en beneficio de los ecosistemas marinos y las comunidades costeras. La delegación mexicana fue encabezada por Alicia Bárcena, secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), y Enrique Ochoa Martínez, subsecretario para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores.

En representación del gobierno que encabeza la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, los funcionarios destacaron que el cuidado de los océanos no puede desvincularse del bienestar de las personas y la justicia social, por lo que México promueve una política ambiental profundamente humanista. En su intervención, subrayaron que enfrentar los retos de la degradación marina exige una transformación estructural del sistema económico y social global.
En este sentido, se anunció el Programa Nacional de Restauración Ambiental, mediante el cual se recuperarán más de 125 mil hectáreas de ecosistemas vitales como manglares, arrecifes, dunas y áreas insulares. Esta acción forma parte de una estrategia más amplia que incluye la publicación de una nueva Política Nacional de Mares y Costas, que integrará biodiversidad, economía azul, resiliencia climática y bienestar comunitario en las decisiones públicas.
México también lanzó la Estrategia Nacional de Limpieza y Conservación de Playas y Costas 2025-2030, una iniciativa multisectorial que busca prevenir la contaminación marina, especialmente por plásticos, al mismo tiempo que dignifica y reconoce el trabajo de las comunidades costeras.
La delegación mexicana presentó además importantes avances en soluciones basadas en la naturaleza, como corredores ecológicos de manglares y macroalgas, acuacultura regenerativa y figuras innovadoras de conservación comunitaria, incluyendo las áreas de prosperidad marina, zonas de refugio pesquero y ranchos marinos. Como parte de una visión regional solidaria, México propuso una planta de tratamiento para el sargazo en Quintana Roo, en colaboración con República Dominicana y otras naciones del Caribe.
Finalmente, Alicia Bárcena suscribió el Llamado a la Acción de Niza en apoyo al Tratado Global sobre Plásticos, dejando clara la posición del país a favor de un instrumento legalmente vinculante, basado en la ciencia y con mecanismos de financiamiento equitativos para combatir la contaminación plástica en los océanos.
Con estas acciones, el gobierno de México da pasos firmes hacia la regeneración ecológica con justicia social, reafirmando su compromiso de cuidar la vida marina y las comunidades que dependen de ella, en concordancia con la visión transformadora de la presidenta Claudia Sheinbaum.