Fenómeno de mar de fondo y posible ciclón amenazan las costas de Guerrero

Acapulco, Gro. El fenómeno de mar de fondo sigue causando estragos en la playa Revolcadero, ubicada en la zona Diamante de Acapulco, donde la franja de arena continúa erosionándose, particularmente en el acceso conocido como Playamar, en avenida Las Palmas. Mientras tanto, autoridades de Protección Civil mantienen una estrecha vigilancia ante la posible formación de un nuevo ciclón en el Pacífico sur mexicano.

En este contexto, surfistas y salvavidas de la zona se mantienen en alerta y en constante preparación ante el aumento de la intensidad del oleaje, impulsado tanto por el mar de fondo como por el llamado mar de tormenta. “Tenemos que mantenernos en forma, no perder la práctica, en caso de ser necesario, por si tenemos que sacar a una persona”, señaló el surfista Ulises Rodríguez, quien advirtió que el nivel del mar y la fuerza de las olas han incrementado notablemente en las últimas semanas.

Actualmente, un grupo de seis restaurantes y enramadas se encuentra al borde de una oquedad formada por el oleaje, lo que pone en riesgo las estructuras y la seguridad en la zona turística.

Mientras tanto, el huracán Bárbara, el primero de la temporada en alcanzar la categoría 1 en la escala Saffir-Simpson, se ha alejado del litoral guerrerense. De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, el fenómeno se localizaba este lunes a 240 kilómetros al sur-suroeste de Playa Pérula, Jalisco, y a 245 kilómetros al suroeste de Manzanillo, Colima, con vientos sostenidos de 120 km/h y rachas de hasta 150 km/h.

Asimismo, la tormenta tropical Cosme se ubica aproximadamente a mil kilómetros al sur-suroeste de Cabo San Lucas, Baja California Sur, y a mil 40 kilómetros al suroeste de Cabo Corrientes, Jalisco. Debido a su lejanía, actualmente no representa peligro para el territorio nacional.

Sin embargo, el meteorólogo Fermín Damián Adame, de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de Guerrero, advirtió sobre un sistema ciclónico en formación al sur de las costas de Chiapas, Oaxaca y Guerrero. De continuar su desarrollo, podría impactar las costas guerrerenses a finales de esta semana, con el potencial de recibir el nombre de Dalila si alcanza vientos superiores a 63 km/h.

“El sistema muestra posiciones erráticas, pero se movería el jueves muy cerca de las costas de Guerrero, a unos 100 kilómetros de Acapulco, generando lluvias de fuertes a muy fuertes durante tres días”, explicó Damián Adame. Además, se prevén cortes de energía eléctrica, interrupciones en los servicios de telefonía celular y posibles deslizamientos de laderas, especialmente el domingo.

Por su parte, el mar sigue mostrando temperaturas elevadas, entre 30 y 31 grados centígrados en su fondo, una anomalía que podría fortalecer cualquier sistema ciclónico que cruce la región.

Ante este panorama, el gobierno federal y las autoridades estatales reafirman su compromiso con la protección de la población. Se mantienen activos los protocolos de vigilancia y prevención, y se exhorta a la ciudadanía y al sector turístico a mantenerse informados y seguir las recomendaciones oficiales.

Con acciones decididas y una vigilancia permanente, el gobierno de México refrenda su compromiso con la seguridad y el bienestar de los habitantes de Guerrero y sus visitantes.