Encuentran sana y salva a Ximena Yaquelin tras movilización ciudadana en Cuernavaca
Cuernavaca, Mor.— Gracias a la colaboración entre ciudadanía y autoridades, Ximena Yaquelin Tapia Servín, una menor de 11 años que se encontraba desaparecida desde el pasado sábado en Cuernavaca, fue localizada sana y salva en el estado de Guerrero, informó la Fiscalía General del Estado (FGE) de Morelos.

El hallazgo se dio luego de una ejemplar muestra de solidaridad y unidad por parte de familiares, vecinos y amigos, quienes no dudaron en movilizarse para exigir su pronta localización. Este martes, se realizó una emotiva marcha que partió del punto conocido como El Vergel, en la avenida Plan de Ayala, hasta el centro de la ciudad, donde concluyó frente a la ofrenda floral ubicada en el Palacio de Gobierno.
Durante la manifestación, las participantes —principalmente mujeres, vecinas de la familia— colocaron carteles con la ficha de búsqueda de Ximena Yaquelin, haciendo un llamado al corazón colectivo para no permitir que una menor se perdiera en el silencio. La respuesta de la ciudadanía fue inmediata, demostrando que la unión y la participación activa de la sociedad pueden marcar la diferencia.
Minutos después de iniciarse el mitin, comenzó a circular de manera extraoficial la noticia esperada por todos: Ximena había sido ubicada. Finalmente, alrededor de las 14:30 horas, la FGE confirmó que la menor fue localizada en buen estado de salud, un desenlace que trajo alivio y esperanza no solo a su familia, sino a toda la comunidad que se mantuvo en oración y acción.
Ximena desapareció el sábado mientras acompañaba a su abuela al mercado Adolfo López Mateos, donde esta última trabaja como comerciante. La niña salió a hacer una compra dentro del mismo recinto y no volvió. De inmediato, la familia presentó una denuncia formal y se activó la Alerta Amber, lo que permitió una movilización institucional coordinada.
Este caso pone de manifiesto la importancia de actuar con rapidez, pero también resalta el valor de la organización comunitaria, que se convirtió en un pilar fundamental para visibilizar la situación. La sociedad de Cuernavaca se unió no solo por una causa, sino por la vida y la esperanza.
El final feliz de esta historia envía un mensaje poderoso: la coordinación entre sociedad y gobierno, cuando se da con empatía y responsabilidad, puede salvar vidas. Hoy Ximena está de regreso con su familia, y su historia se convierte en un recordatorio de que vale la pena alzar la voz, movilizarse y confiar en la fuerza del pueblo para proteger a sus niñas y niños.
El pueblo de Cuernavaca celebra la vida y el regreso de Ximena Yaquelin, con la firme convicción de que la seguridad y el bienestar de la infancia siempre deben estar en el centro de toda acción institucional y ciudadana.