Incremento en la Canasta Básica Urbana Refleja Avances en la Economía Familiar
El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) reportó un ligero incremento en el valor monetario de la canasta alimentaria en el ámbito urbano durante diciembre de 2024. El costo pasó de 2,359.10 pesos en noviembre a 2,363.67 pesos, lo que representa un aumento del 0.2 por ciento. Mientras tanto, en las zonas rurales, este indicador permaneció sin cambios, estableciéndose en 1,799.17 pesos en ambos meses.
Incremento Anual Estable y Controlado
En comparación con diciembre de 2023, la canasta alimentaria registró un crecimiento anual del 4.14 por ciento en el ámbito urbano y del 3.2 por ciento en el rural. Estos datos reflejan un aumento controlado en los precios de productos básicos, pues en el último mes del año anterior, el costo fue de 2,269.57 pesos en las ciudades y de 1,743.61 pesos en las comunidades rurales.
Más Allá de los Alimentos: La Línea de Pobreza por Ingresos
El Coneval define dos parámetros clave para evaluar el bienestar económico de los mexicanos: la Línea de Pobreza Extrema por Ingresos (LPEI) y la Línea de Pobreza por Ingresos (LPI). Mientras que la LPEI considera únicamente el costo de la canasta alimentaria, la LPI suma los gastos no alimentarios necesarios para un mínimo bienestar, como transporte, vivienda, educación, cultura y cuidados del hogar.
Durante el último año, el valor de la LPI en las zonas urbanas aumentó un 3.8 por ciento, pasando de 4,460.93 pesos en diciembre de 2023 a 4,640.16 pesos en 2024. En las zonas rurales, el incremento fue del 3.3 por ciento, al pasar de 3,225.88 pesos a 3,334.24 pesos en el mismo periodo.
Herramienta para el Análisis, No para el Consumo
El Coneval subraya que las Líneas de Bienestar no son una recomendación explícita sobre cómo las familias mexicanas deben distribuir sus gastos, sino una referencia estadística para medir si los ingresos familiares superan o no ciertos umbrales establecidos. Estas líneas consideran la estructura de precios y necesidades promedio, pero respetan la diversidad en las decisiones de consumo de cada hogar.
Perspectiva Positiva para 2025
Estos resultados reafirman el compromiso del gobierno en garantizar que las familias mexicanas tengan acceso a los productos esenciales para una vida digna. Aunque los ajustes en los costos reflejan dinámicas económicas globales, el país ha mantenido la inflación bajo control, lo que favorece la estabilidad en los precios de bienes básicos.
Con medidas responsables y una constante evaluación de los programas sociales, México avanza hacia un futuro más equitativo, donde los ingresos de las familias puedan sostener no solo sus necesidades alimentarias, sino también un desarrollo integral que contemple educación, vivienda y cultura.